
Devolver la vida a un campo o territorio carbonizado por el fuego requiere mucho esfuerzo y la paciencia suficiente para que la naturaleza vuelva a despertar. Sin embargo, el apoyo del ser humano puede acelerar este proceso.
Con esta intención cada vez son más las empresas que apuestan por tareas de reforestación de zonas quemadas por incendios en los veranos como consecuencia de la mano humana y por las elevadas temperaturas que sufre España en los meses de verano.
Uno de los ejemplos más recientes en reforestación es el que ha llevado a cabo la compañía de transporte y mensajería urgente Nacex, filial del grupo Logista, junto con Adena. Ambas entidades llevan desde finales del pasado mes de octubre colaborando en la reforestación de un sabinar en el Parque Natural del Alto Tajo, concretamente en la zona de Riba de Saelices (entre las provincias de Guadalajara y Cuenca).
Reforestar
Un grupo de 40 voluntarios de la compañía y de Adena han colaborado en esta jornada representativa del proyecto global que Nacex realiza con Adena.
Desde hace un año, Nacex colabora con la organización ecologista para la restauración del Alto Tajo que en 2005 sufrió graves incendios durante los meses de julio y agosto. La compañía de mensajería ha querido sumarse a esta causa por su importancia medioambiental, y por ello ha plantado más de 1.000 árboles y arbustos autóctonos a lo largo del último año. La parte final del proyecto prevé plantar otros 500 árboles antes de finales de año. El objetivo de este proyecto es cubrir la zona de animales y vegetación.
También otras compañías
Pero no sólo Nacex se lanza a plantar árboles para mejorar el medio ambiente y su imagen social. IMC Med Cosmetics y su marca de fijación capilar, Fixonia, ha replantado 45.000 árboles. Adena trabaja con 40 empresas, que pagan entre 18.000 euros y 30.000 euros por reforestación.
BBVA, Canon o Coca-Cola están entre ellas. La Fundación Banco Santander también reforesta el Alto Tajo. La Fundación Foresta, creada por las empresas de automoción Flick y Domingo Alonso; y la Caja Rural de Canarias también plantan árboles en el archipiélago.
Por su parte, las cajas de ahorros gastaron 4,73 millones durante el pasado ejercicio en parques naturales. Uno de los programas más conocidos es Un millón de árboles de especies autóctonas, impulsado por la entidad Caja Madrid y la Fundación Territorio y Paisaje, de Caixa Catalunya.