El Barcelona regresa a semifinales de la Champions League, cuatro años después, tras derrotar al Manchester United por 3-0 (global de 4-0), gracias a un Leo Messi espectacular. El capitán blaugrana manejó a su antojo el partido y con dos chispazos apagó la rebelión del Manchester United, antes de que Philippe Coutinho redondease la noche en la segunda mitad. Liverpool u Oporto, el rival por una plaza en la gran final.
Madrid está más cerca. A solo dos pasos de distancia tras una nueva exhibición de un Messi que no para de repetir aquello de "esa copa tan linda". El argentino se fijó levantar 'La Orejona' esta temporada y está llevando su plan a la perfección, como capitán y como estrella. Ante el Manchester United, otra exhibición suya apareció para difuminar un amago de remontada inglesa y entonar a un equipo que pone la directa como máximo favorito.
Y es que el Camp Nou se preparaba para una fiesta de las grandes noches europeas. Pero la celebración y el ánimo inicial estuvo cerca de convertirse en pesadilla. Ni más ni menos que 30 segundos después del pitido de Brych, Pogba puso un balón en profundidad a Rashford que pilló a toda Barcelona dormida. Nadie se esperaba ese comienzo y el inglés, solo ante Ter Stegen, estrelló las ilusiones de la ciudad industrial contra el travesaño.
Era un aviso, pues Solskjaer había ideado un plan similar con el que triunfó en París. Inicio muy fuerte, presión alta y a esperar. La primera parte se cumplió y continuó con una buena jugada de Pogba. La segunda estaba saliendo a la perfección...hasta que apareció el de siempre.
La defensa británica perdió la posesión en la salida del balón, Messi se adueñó de su gran amigo redondo y a partir de entonces fue todo magia. Habían pasado 16 minutos de juego, el conjunto culé ni se había enterado todavía de que podía vivir otra noche negra, pero el '10' se fue de dos rivales, encaró la frontal del área y con ese disparo tan característico suyo puso la pelota pegada a la cepa del palo, lejos del alcance de De Gea.
El primero en el marcador y el despertar de toda una afición. A lomos del argentino todo es más fácil, que además se desquitaba de su mala racha de 12 encuentros seguidos de cuartos de final sin ver puerta. Pero no todo había quedado aquí, pues tres minutos después Messi volvió a robar, volvió a encarar y volvió a disparar, aunque esta vez mucho peor. Sin embargo, cosas del destino, un De Gea que está imperial en el 95% de los partidos, volvió a fallar en el 5% decisivo. El español, errático al interceptar el esférico, dejó que este se colase por debajo de sus brazos y acabase suponiendo el segundo.
Messi hundió el plan de Solskjaer
No se había llegado al minuto 20 y la eliminatoria ya estaba prácticamente decidida. Dos chispazos del capitán blaugrana habían servido para apagar la rebelión del United. A partir de entonces, todo fue más fácil entre toque y toque de los de Valverde contra un equipo hundido anímicamente. Pogba, mientras tanto, desquiciado de no verse capaz y Brych perdonándole hasta en tres ocasiones la tarjeta.
Todo muy plácido, hasta que apurando los últimos instantes de la primera parte, el de siempre hizo lo de siempre. Messi recogió la pelota en el centro del campo, se fue de todo lo que se le puso por delante, caños incluidos, y su fiel socio Alba que aparecía desde su carril izquierdo para dejar el tercero a Sergi Roberto. Sin embargo, el De Gea más habitual, se encontraba el disparo del español para despejar con la cara y dejar el 2-0 antes del descanso.
Con la reanudación, todo siguió igual. Fútbol tranquilo y olés en la grada. Disfrute de una plantilla a la que si algo le marcha mal esta temporada es el rendimiento esperado de Coutinho. Pero para eso están las noches en las que todo sale, para que el brasileño se inventase un disparo desde fuera, al estilo que el encumbró en Liverpool, y se colase por la escuadra de De Gea.
Una hora de encuentro, el tercero y la cuenta. Pues poca historia iba a tener más el partido. Messi lo intentó de chilena, Valverde fue dando cambios para dosificar a Sergi Roberto, Arthur (otra descomunal noche) y Coutinho, quien se llevó una sonora ovación pese a su gesto desafiante a la grada en la celebración. El Barcelona se dedicó a buscar el gol que tanto se le resiste a Luis Suárez, sigue sin marcar en esta edición pese a su inagotable esfuerzo, y por si faltaba alguien a la fiesta, Ter Stegen sacó una mano prodigiosa a Alexis Sánchez cuando el encuentro ya agonizaba.
El Barcelona vuelve a estar entre los cuatro mejores de Europa. El runrún del triplete empezará a sonar ahora. LaLiga sentenciada, final de Copa y en semifinales de la Champions. Pero no hay tiempo para soñar, con mayo volverá la máxima competición y se volverá a exigir el máximo. También a un Leo Messi que suspira por "esa copa tan linda". Liverpool u Oporto separan Barcelona de Madrid. Ah, por cierto, la Juventus de Cristiano Ronaldo cayó ante el Ajax, la fiesta del Camp Nou tenía que ser total.
FICHA TÉCNICA
-RESULTADO: Barcelona 3-0 Manchester United (Messi 16' y 19' y Coutinho 61').
-BARCELONA: Ter Stegen, Sergi Roberto (Semedo 70'), Piqué, Lenglet, Jordi Alba, Busquets, Rakitic, Arthur (Vidal 74'), Coutinho (Dembélé 80'), Messi y Suárez.
-MANCHESTER UNITED: De Gea, Jones, Lindelof, Smalling, Young, Fred, McTominay, Pogba, Martial (Dalot 64'), Lingard (Alexis 79') y Rashford (Lukaku 72').
-ÁRBITRO: Felix Brych. Mostró amarilla a Luis Suárez en el Barcelona.
-ESTADIO: Camp Nou.