Madrid, 3 dic (EFE).- El presidente de ACS, Florentino Pérez, afirmó hoy que el grupo tiene la intención de incrementar su participación en Iberdrola, que actualmente es del 12,6 por ciento, para tener un "papel destacado" en la eléctrica y consolidar su posición en el sector energético tras su salida de Unión Fenosa.
En su discurso ante la junta general extraordinaria de accionistas del grupo, Pérez aseguró que el objetivo de ACS (ACS.MC)es colaborar en el crecimiento y la rentabilidad de IBERDROLA (IBE.MC) como accionista de referencia, en colaboración con el resto de socios de la eléctrica.
Asimismo, explicó que ACS ha intentado construir un gran grupo energético mayoritariamente español a partir de la participación del 45,5 por ciento que el grupo tenía en Unión Fenosa "bien mediante una fusión con Iberdrola, bien mediante la compra de activos de esta última tras alguna operación corporativa".
Los problemas de competencia, dijo, no permitieron llevar a cabo este objetivo, razón por la que el grupo consideró que "ya no era razonable" permanecer más tiempo en el accionariado de las dos eléctricas, para centrarse sólo en Iberdrola.
Sobre el papel que ACS pretende tener en Iberdrola, Pérez aseguró que "no será una forma de actuar distinta" a la mantenida en Unión Fenosa.
"La venta de Unión Fenosa ha sido una decisión adecuada y realizada en el momento oportuno", añadió el presidente de ACS, quien aseguró que la salida del accionariado de esta compañía permitirá al grupo continuar "sin ambigüedad" su trayectoria en el sector de la energía.
El pasado 30 de julio, ACS acordó con Gas Natural la venta de su participación en Unión Fenosa en dos fases, de tal forma que se traspasó el 9,99 por ciento por 1.675 millones de euros, mientras que el traspaso del 35,4 por ciento restante se materializará a mediados de enero por importe de 5.915 millones.
Pérez subrayó también que, una vez finalizada la venta de Unión Fenosa, la situación financiera de ACS quedará reforzada, ya que reducirá su endeudamiento hasta 6.000 millones, unos 13.000 millones menos.
