Una buena evolución del empleo podría impulsar las estimaciones de crecimiento económico este ejercicio
Aunque es muy pronto para saber hasta dónde llegarán las desviaciones de déficit de las comunidades autónomas este año, ya son varios los organismos que señalan que es muy probable que varias no puedan ajustarse al 0,7 por ciento permitido por el Estado.
A principios de julio lo indicó la AIReF, que insistió en que Cataluña figuraría en este grupo. Ayer lo reiteró BBVA Research. Rafael Doménech, economista jefe de economías desarrolladas de la entidad, afirmó que aunque el grado de incumplimiento será menor que el de 2015 (el año pasado el déficit de Cataluña alcanzó el 2,7 por ciento del PIB, frente al 0,7 por ciento permitido), en 2016 todavía se quedará "lejos" del objetivo. Para Doménech, la clave para moderarlo es congelar el gasto, de manera que el ajuste se produzca a través de los ingresos, que mejorarán gracias a la recuperación de la economía.

De hecho, BBVA es optimista con las expectativas de la economía española y la catalana, a pesar de la incertidumbre política y del Brexit. Así, sostiene que, aunque con bastante probabilidad estas dos circunstancias les obliguen a revisar a la baja las previsiones de PIB español para 2017, este recorte se verá compensado por una previsible mejora en la cifra para 2016.
Aunque BBVA mantiene que la economía de Cataluña se expandirá un 2,9 por ciento este año, Doménech no descarta que, en el caso de que el empleo evolucione bien, el crecimiento vuelva a superar la tasa del 3 por ciento, como en 2015. La evolución del empleo será clave.