La Mesa de contratación de la concesión de los túneles de Tabasa y del Cadí ha reunido esta mañana para analizar la documentación presentada por la empresa Infraestructuras Viarias de Catalunya, SA (invicem), de Abertis. Tras valorar que la oferta no cumple las condiciones fijadas en el contrato de gestión, ha decidido declarar desierto el concurso para la adjudicación de la conservación y la explotación de los túneles de Vallvidrera y sus accesos, y los túneles del Cadí y
El órgano de contratación ha optado por iniciar, a partir de ahora, un procedimiento negociado. En este nuevo proceso se mantendrán las condiciones esenciales del concurso anterior y en los próximos días se invitará a participar algunas de las empresas que manifestaron interés por este concurso, incluida la compañía que optó a la adjudicación.
La gestión de los dos túneles y sus accesos es un activo del gobierno de la Generalitat y el departamento de Economía y Conocimiento ha optado por abrir un proceso negociado para conseguir la máxima rentabilidad de esta concesión. El Gobierno mantiene su objetivo de adjudicar el contrato antes del 31 de diciembre. La operación se enmarca en el proceso de simplificación del sector público, que la Generalitat puso en marcha con el objetivo de reducir el déficit público y equilibrar las finanzas de la administración catalana