Prisa, ahogada por una deuda de 3.467 millones de euros a marzo de 2012, se ha visto obligada a ceder poder y dar entrada a los bancos acreedores en su capital. El grupo, animado por la familia Polanco, ha solicitado que en la próxima junta de accionistas se apruebe la capitalización de 434 millones de euros de deuda, una medida que permitirá rebajar la presión del pasivo de cara a los próximos vencimientos y que convertirá en accionistas del grupo editorial a parte de su banca acreedora y a inversores institucionales.
Convertir en acciones el 12% de su deuda es un paso muy importante para el grupo que necesita reducir sus compromisos hasta situarlos en torno a los 1.000 y los 2.000 millones de euros. Entre la elevada deuda y el mal comportamiento de los ingresos y el ebitda en los últimos meses (cerró 2011 con una caída del beneficio operativo del 26,7% y en el primer trimestre de 2012 del 8%) no se espera que pueda hacer frente a los vencimientos de cara a 2014. Por eso el grupo que preside Juan Luis Cebrián se está viendo obligado a aligerar deuda, una situación que le llevará a tratar de capitalizar más, algo que está en manos de los bancos, o a vender activos en el medio plazo.
En este sentido, el grupo tiene la opción de vender su parte de Telecinco o tratar de sacar a bolsa Santillana. La opción de deshacerse de lo que le queda de Sogecable no está sobre la mesa, ya que actualmente le aporta una gran parte del ebitda.
La operación, que implica una ampliación de capital dentro de dos años y que ha valorado a la compañía en un euro por acción. "Al final para ellos la mejor solución sería capitalizar deuda para poder rebajarla entre los 1.000 o 2.000 millones, ya que no pueden afrontar los compromisos", aseguran fuentes del mercado.
Las claves
La operación, que está sujeta a la aprobación definitiva por parte de los banco acreedores, contempla, por un lado, la emisión de bonos obligatoriamente convertibles dentro de dos años en acciones de clase A del grupo editorial. Estos bonos están dirigidos a los inversores institucionales por un importe total de 100 millones de euros en efectivo.
Por su parte, las entidades acreedoras se harán con bonos de la sociedad por 334 millones de euros mediante la capitalización parcial de sus créditos. El precio de la conversión de los bonos será de 1,03 euros por título y se llevará a cabo mediante la aprobación de una ampliación de capital dentro de dos años. En el caso de que la ampliación se hiciera ahora, con los títulos a 0,39 euros, los bancos acreedores se podrían hacer con gran parte de la compañía, ya que su capitalización de mercado apenas alcanza los 446 millones de euros, según los datos de Bloomberg. Aun así, serán inversores de referencia.
Esta primera capitalizacion de deuda parece que ha sido sólo suscrita por los bancos internacionales, entre los que forma parte HSBC, banco agente del sindicado, e IKB. Este tipo de medidas, la de darle a la banca parte de la compañía cuando no se puede hacer frente a la deuda, tienen mejor acogida a nivel internacional.
Se dispara en bolsa
La noticia ha sido muy bien recibida en bolsa. Las acciones de la compañía se han llegado a disparar un 48,8% a lo largo del día aunque finalmente ha cerrado a 0,39 euros con una mejora del 38 por ciento. Aun así, los analistas esperan que Prisa de más pasos.
Entidades
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