
La multinacional francesa Alstom explicó ayer a elEconomista que, si consigue el contrato que le adjudicaría la fabricación de treinta trenes AVE que pronto realizará Renfe, los producirá en España. Concretamente, su intención es ensamblarlos en la factoría de Santa Perpétua de Mogoda, en Barcelona, que sería la gran beneficiada.
Este contrato, que se sacará a concurso esta semana, está valorado en 2.642 millones y las primeras espadas de la industria ferroviaria con centros en España como CAF, Siemens, Talgo o Bombardier también compiten por él. Es un contrato que incluye la fabricación y el mantenimiento de los trenes de alta velocidad.
Esta adjudicación se prevé que se saque a concurso esta misma semana y el factor España será un punto a favor del adjudicatario. De hecho, todos los anteriores fabricantes tienen o raíces en España o factorías en el país. El grupo galo lo que ofrece es garantizar el ensamblaje íntegro y no sólo producir piezas separadas.
No obstante, al concurso se pueden sumar otras empresas, ya que aunque primará el hecho de fabricar parte del pedido en España, la producción local no es una condición imprescindible para participar. Según el proyecto, los quince primeros trenes AVE se incorporarían a la flota de manera inmediata una vez fabricados. Los quince restantes los solicitaría Renfe en lotes de cinco unidades, en función de sus necesidades.
Alstom no pudo cuantificar el impacto que tendría el pedido en la planta de Santa Perpétua de Mogoda (que cuenta con contratos que garantizan la producción durante los dos próximos años), pero afirma que aseguraría su viabilidad a medio y largo plazo. Para Alstom, "tras muchos años viviendo de la exportación, sería una buena noticia tener un pedido nacional" y asegura que si lo lograra "seguramente" se traduciría en nuevos empleos. De hecho, su último pedido interno fue de Renfe en 2008.
Siemens y Bombardier también aprietan
Por su parte, Siemens y Bombardier explicaron a este periódico que, si fueran adjudicatarios de este contrato, el pedido también tendría un efecto positivo sobre las fábricas españolas. La consejera delegada de Siemens España, Rosa García, afirmó que gracias a éste, la fábrica de Cornellà tendría "mucha carga de trabajo", puesto que se ocuparía de los motores de tracción de las locomotoras.
Fuentes de Bombardier, por su parte, aseguraron que muchas piezas también se fabricarían en España, en su centro de excelencia de Trápaga (Vizcaya). Y que sopesarían hacer el resto de piezas en depósitos de Renfe u otras ubicaciones del país.
La apuesta de Alstom por Cataluña y España se ha reafirmado recientemente con la compra de la planta catalana, en la que hasta ahora estaban en régimen de alquiler. La empresa también ha retirado el ERE temporal que afectaba a sus 500 trabajadores y les obligaba a no trabajar más del 70 por ciento del tiempo.
En el ámbito de la alta velocidad, Alstom presentó los últimos avances en materia aerodinámica, tracción y materiales para reducir el consumo y el impacto ambiental, una combinación con la que la compañía ha podido reducir el consumo energético de los trenes AVE un 30%.