Muchos de los pueblos catalanes reciben a sus visitantes con un imperante mástil donde ondea una estelada (bandera independentista) en diferentes espacios públicos como rotondas, ayuntamientos o plazas.
Esto no había significado problema alguno hasta que Societat Civil Catalana (SCC), una entidad que aboga por la unidad española, emitió una petición a la Junta Electoral Central para la retirada de estas banderas por considerarse un símbolo "partidista". Sobre todo durante las elecciones, ya que podría vulnerar el artículo 103 de la Constitución que salvaguarda la neutralidad de la Administración Pública.
La Junta Electoral Central emitió anteayer una resolución donde da la razón a SCC y ordena la retirada de esteladas, ya que los poderes públicos tienen que, según señala el propio comunicado, "mantener estrictamente la neutralidad política".
Mayorías municipales
La colocación de estas banderas se ha producido tras debates en los diferentes plenos municipales donde se consultaba a los principales grupos de gobierno sobre su colocación. Lo cierto es que la gran mayoría de los municipios que tienen esteladas en sus espacios públicos están bajo la alcaldía de Convergència i Unió, ya que el papel municipal de Esquerra Repúblicana es prácticamente nulo. De acuerdo con la resolución y petición de SCC, ayuntamientos, complejos deportivos y todo tipo de edificios públicos donde haya banderas independentistas deberán retirarlas.
SCC aprovechó para mostrar su satisfacción ante la resolución y presentó un estudio donde cifraban que el independentismo solo representa al 25 por ciento de los catalanes pese a que un 78 por ciento de los ayuntamientos ha mostrado apoyo a la causa secesionista.