Si fracasa la oferta de compra sobre BPI, CaixaBank podría reducir el 44,1 por ciento que controla en el luso para bajar el consumo de capital de la inversión. El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Cortázar reconoció ayer que es uno de los escenarios a valorar "en su momento", sin detallar qué otras alternativas están sobre la mesa.
La opa está condicionada a lograr el control, lo que implica rebasar el 50 por ciento de participación y que BPI desblinde unos estatutos que impiden ejercer un derecho de voto superior al 20 por ciento. El cambio estatutario se votará en la junta convocada por la entidad portuguesa el día 29, a solicitud de su segundo mayor accionista. La angoleña Isabel do Santos, dueña del 18,6 por ciento de BPI, busca acelerar la resolución de una oferta sobre la que ha presionado para que se suba el precio.
Durante su intervención en unas jornadas organizadas por la APIE, Cortázar defendió que la oferta incluye una prima próxima al 30 por ciento, generará 130 millones en sinergias y garantizará la autonomía portuguesa de BPI. Pero reconoció que interesa tomar el control porque su contabilización actual es costosa en recursos propios y la estrategia de CaixaBank es reducir el peso de sus participadas desde el 16 al 10 por ciento del capital antes de 2017. Para lograrlo baraja trasferir su inversión en compañías como Repsol a Criteria y sacarla después a bolsa. Este proyecto no incluye la división de seguros.
Nueva financiera en China
Por otro lado, CaixaBank ha obtenido la licencia por parte del regulador local de China, para iniciar la actividad de financiación de compra de automóviles en ese país. Tras dos años de papeleo, la joint venture creada por FinConsum, filial de crédito al consumo de CaixaBank, Credit Gain, subsidiaria de The Bank of East Asia (BEA), y Brilliance, el fabricante chino de automóviles, podrá empezar a operar de forma inmediata. En China se venden unos 22 millones de automóviles anuales y Brilliance es uno de los diez primeros fabricantes locales con una producción anual de 570.000 vehículos.
El nombre de la joint venture es Brilliance BEA Auto Finance Company (BBAFC) y su capital social asciende a 800 millones de yuanes (alrededor de 115 millones de euros). Brilliance posee el 55 por ciento del capital, mientras que FinConsum y Credit Gain controlan un 22,5 por ciento cada uno. La sede de la compañía está ubicada en Pudong, el distrito financiero de la ciudad de Shanghai. BBAFC ofrecerá servicios financieros a los 500 concesionarios propiedad de Brilliance, con el foco en la financiación de la compra de automóviles y las operaciones de leasing.