El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ve indicios para investigar al presidente catalán, Artur Mas, por cometer un presunto delito de desobediencia al no acatar la orden del Tribunal Constitucional (TC) que suspendía cautelarmente la consulta alternativa del 9-N.
Así se recoge en varios autos en los que el Alto Tribunal justifica la decisión que tomó en diciembre, que pasaba por admitir a trámite las denuncias y querellas contra Mas, la vicepresidenta, Joana Ortega, y la con- sejera de Educación, Irene Rigau, que presentaron el sindicato Manos Limpias, UPyD y el Ministerio Fiscal, entre otros.
Los escritos sostienen que los querellados continuaron con la preparación de la consulta, la publicidad institucional y con la realización de actos administrativos de su desarrollo hasta llevar a cabo la votación después de la suspensión dictada por el Constitucional el 4 de noviembre. Por todo ello, se les investigará por "incurrir presuntamente en el delito de desobediencia a resoluciones judiciales cometido por Autoridad pública".
Por otro lado, el tribunal también explica que no admitió a trámite la querella contra el consejero de Interior, Ramón Espadaler, tal y como solicitaba Manos Limpias, porque como responsable del mantenimiento del orden público "cumplió con los deberes propios de su cargo". Sobre el portavoz Francesc Homs considera que no se identifican los actos que pueden ser entendidos como constitutivos de los delitos que se exponen.
