Por primera vez en los últimos años ha habido un repunte de precios en algunos activos de la capital catalana y se ha pasado de 1.896 euros el metro cuadrado de las oficinas de Barcelona en 2013 a 2.500 euros este año. Estas cifras todavía están lejos de los 5.200 euros del 2011, cuando los inversores querían comprar con bajo riesgo en zonas prime, pero empieza a haber un cambio, después de que en 2013 apostaban por inversiones en zonas más deslocalizadas y asumían más riesgo.
Así se desprende del balance de CBRE del sector inmobiliario catalán durante 2014, a falta de 10 días para cerrar el año. El volumen de operaciones en el mercado de oficinas en la capital catalana se ha incrementado un 56 por ciento este año hasta los 777 millones de euros, tras venir de 340,6 millones en 2013, 314 millones en 2012 y 108 millones en 2012.
Una de las sensaciones de la consultora inmobiliaria es que ?los precios han tocado fondo? y tras dos años de mejoras, ?la recuperación es estructural?. En Barcelona el mercado se está recuperando y ya no solo se buscan zonas prime y los inversores asumen más riesgo. Las socimi han sido los principales protagonistas este año y los compradores internacionales (incluyendo estos inversores) representan el 80 por ciento. Por otro lado, uno de los principales perfiles vendedor ha sido el sector público, que ha concentrado el 33 por ciento de las operaciones, así como los fondos institucionales (42 por ciento).
Tendencias 2015
CBRE prevé que en el primer semestre de 2015 no cambie esta tendencia de mejora que ya se inició en 2013 y se ha consolidado este año. ?Hay fondos internacionales con ganas de entrar en el mercado español?, apunta Xavier Güell, director de Inversión de CBRE Barcelona, que añade que uno de los problemas de la capital catalana es la falta de oferta.
En el conjunto del territorio español, se prevé cerrar el año con una inversión de 9.000 millones, una cifra que ya se acerca a los 10.000 millones de inversión máxima alcanzada en 2007. La caída tocó fondo en 2012, con unos 2.600 millones de euros, al que le siguió un volumen de inversión de 5.000 millones en 2013, una cifra que duplicaba la del año anterior.
