La Comisión Permanente del Consejo de Estado aprobó por unanimidad un dictamen favorable a la impugnación de la consulta alternativa del 9 de noviembre que propuso la Generalitat.
El dictamen, solicitado previamente por el Gobierno al órgano consultivo, se remitirá al Consejo de Ministros de hoy para iniciar los trámites de la impugnación. La estrategia del Gobierno es que, una vez se haya estudiado el dictamen emitido por el Consejo de Estado, que actúa como mero asesor, el Gobierno tendrá vía libre para recurrir la consulta alternativa al Tribunal Constitucional como ya hiciera con el decreto de convocatoria del 9N que firmó Artur Mas. La actuación del Constitucional, teniendo en cuenta el precedente de la anterior prohibición, es que esta nueva consulta también constituye un intento de celebrar un referéndum encubierto, algo que no se ajusta a la Constitución.
Mas y Rajoy, erre que erre
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, no quiso ni llamar consulta al proceso del 9-N y lo rebajó al término de pseudoconsulta e insistió en que "no cumple con las condiciones democráticas".
La réplica no se hizo esperar en tierras catalanas con la irónica respuesta del president de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, que sentenció "todo menos sorpresa". El informe del Consejo tampoco ha cambiado la opinión del consejero de la Presidencia, Francesc Homs, ni de Carme Forcadell de la ANC, que apuestan por seguir adelante.