CaixaBank está dispuesto a jugar un papel relevante en el proceso de consolidación bancaria en Portugal y, en concreto, en la subasta de Banco Espírito Santo. Según explicó el consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, el análisis del proceso de venta que prepara el Ejecutivo portugués será analizado por parte del Banco Portugués de Investimento (BPI), entidad participada en un 44 por ciento por el banco español.
Sin embargo, CaixaBank todavía no ha decidido si inyectará más recursos en BPI para realizar la operación o si incrementará su participación accionarial por encima del 44 por ciento. "Es todavía muy pronto para decidir una estrategia", aseguró Gortázar. Aunque el Gobierno luso ha anunciado un proceso acelerado de venta del BES tras ser rescatado con dinero público, lo cierto es que Portugal afronta unas elecciones generales en 2015 que podría retrasar el proceso.
Para Gortázar, uno de los elementos clave en la consolidación bancaria europea son los test de estrés que se divulgarán mañana y que permitirán conocer la calidad de los activos bancarios. Aunque mantuvo el compromiso de confidencialidad exigido por el Banco Central Europeo (BCE), el consejero delegado se mostró muy satisfecho con el resultado de los mismos.
Otra las novedades que anunció Gortázar fue la especialización de 386 oficinas de las 5.685 que tiene CaixaBank en el negocio agrario bajo la marca AgroBank. Según explicó, la entidad podría seguir por ese camino y "llevar a cabo otro tipo de especializaciones".
CaixaBank logró en los primeros nueves meses del año un beneficio neto de 466 millones de euros, un 1,6 por ciento más que en el mismo período de 2013.