La venta de patrimonio es una de las estrategias del Gobierno catalán con la que pretende ahorrar costes y conseguir ingresos extraordinarios, que se suma a la implementación de nuevas tasas e impuestos y a las privatizaciones. Con este propósito, la Generalitat ha vendido ocho de sus 12 sedes departamentales desde el año 2012, aunque no ha conllevado un ahorro significativo a corto plazo.
En concreto, la Generalitat ha conseguido un ahorro del tres por ciento este año tras la venta de sus departamentos, al pasar de pagar 20,3 millones de euros en 2012 en concepto de censos (renta anual que paga el propietario de un bien inmueble) a sumar unos costes de 19,7 millones este año por alquiler este año. Hace un par de años, a los costes que tenía la Generalitat por la propiedad de sus sedes departamentales, había que sumar 1,4 millones de euros en concepto de gastos de mantenimiento, lo que en total elevaba a 21,7 millones lo que pagaba por sus sedes, excluido el IVA.
Alquileres
La primera operación de venta de un edificio público que cerró la Generalitat para obtener ingresos extraordinarios fue en marzo de 2012, cuando vendió la sede del departamento de Territorio y Sostenibilidad por 52 millones a la empresa Bancalé Servicios Integrales.
En 2013, el Gobierno de Artur Mas adjudicó un lote de 13 edificios -entre los que se encontraban la sede de los departamentos de Agricultura y Educación- a la gestora inmobiliaria de la multinacional francesa Axa por 172 millones de euros. Ese mismo año, también vendió la sede del departamento de Economía por 23,2 millones al grupo farmacéutico italiano Angelini, que lo adquirió con una rebaja del 20 por ciento sobre el precio de salida, que era de 29 millones.
El Gobierno catalán ha vendido un lote de 13 edificios por 201 millones de euros a la empresa aseguradora Zurich, entre los que se encuentran la sede de los departamentos de Bienestar Social y Familia, Justicia e Interior.
Los alquileres más elevados este año corresponden a los gastos de las sedes de Territorio y Sostenibilidad, ubicada en la calle Josep Tarradellas, 2-6, de cuatro millones, y a los de Educación, situada en Vía Augusta 202-226, por la que paga también cuatro millones, sin tener en cuenta el IVA. Por el departamento de Bienestar Social este año paga 2,6 millones; por el de Agricultura dos millones; le sigue el de Interior (1,5 millones); el de Empresa y Ocupación, en propiedad, (1,4 millones); Economía (1,1 millones); Justicia (un millón); Gobernación (918.485 euros) y Cultura (869.532 euros). Por su parte, el departamento de Salud lo tiene en derecho de uso.
Desde el año 2012, la Generalitat ha vendido un total de 34 edificios por 523,6 millones de euros, que le ha permitido un ahorro de 33,2 millones anuales en concepto de cuotas de censos y gastos de mantenimiento.