El Govern vuelve a dejar en el dique seco a las farmacias catalanas por segundo mes consecutivo. Pese a los acuerdos y compromisos adquiridos el pasado junio por la Generalitat cuando "aseguraba" que seguirían pagando aunque fuese a través del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) o tesorería propia, lo cierto es que el Gobierno catalán adeuda 101,2 millones de euros correspondientes a los medicamentos dispensados por las farmacias en el mes de agosto.
La factura de los fármacos tendría que haberse abonado el pasado lunes por parte del Servei Català de la Salut. Con este nuevo impago, la deuda que tiene la Generalitat con las farmacias se duplica y se suma a los 119,7 millones de euros que tampoco se pagaron en julio, lo que hace un agujero de 220,9 millones de euros.
La gravedad de la situación es evidente cuando, según el Consejo de Colegios Farmacéuticos de Cataluña y la patronal Fefac, la Administración aún no les ha enviado "ni un calendario de pagos". Añaden que la falta de planificación por parte del Ejecutivo catalán, sumado al retraso de los pagos de los medicamentos, deja a las farmacias "en un punto de incertidumbre y angustia".
