La Generalitat reta al Gobierno central en materia comercial. Ayer, el Govern presentó ante el Consejo Asesor de Comercio las principales líneas de la futura Ley Reguladora de la Actividad de Comercio, Servicios y Ferias, que mantiene la regulación existente en Cataluña en materia de horarios comerciales, que fue impugnada por el Estado.
Tal y como se recoge en uno de los títulos de la futura normativa, "se elimina la exigencia de acuerdo previo para los Ayuntamientos de menos de 5.000 habitantes en la apertura de domingos y festivos de comercios de menos de 150 metros cuadrados".
Por otro lado, también se amplía el número máximos de horas de apertura diaria, pasando de 12 a 13 horas, para los pequeños, medios y grandes establecimientos comerciales dedicados a la venta de productos de alimentación, perfumería y droguería de consumo cotidiano situados en trama urbana consolidada. La Generalitat pretende blindar el modelo comercial catalán ante la legislación central, favorable a la liberalización de los horarios comerciales.
La futura normativa amplía las posibilidades de venta en rebajas y liquidación, elimina el concepto ?saldo?, se deja a criterio del empresario la determinación de la obsolescencia de un producto y se da cobertura y seguridad a las ventas promocionales con finalidad incentivadora. Así mismo, se elimina la obligación de comunicar previamente las ventas promocionales y se sustituye el control previo por el control a posteriori.