El mercado inmobiliario de Barcelona está viviendo un comienzo de año muy positivo, tanto por el interés por parte de los inversores como por número de operaciones cerradas, especialmente en los segmentos de inversión y oficinas. Así se desprende del informe de oficinas del primer semestre de la consultora inmobiliaria Aguirre Newman.
Según el director de oficinas de Aguirre Newman Barcelona, Josep Maria Piqué, la reducción de la tasa de disponibilidad por debajo del 15 por ciento ?podría suponer un punto de inflexión que marque un cambio de tendencia en este segmento, que suma ya tres semestres seguidos de mejora en la contratación y que ha reducido drásticamente los proyectos de obra nueva?. Piqué explica que ?no está prevista la entrega de ningún proyecto nuevo en 2015, que llegará en 2016, aunque escasos?.
El auge de la reconversión de edificios obsoletos, principalmente a hoteles, en el centro de Barcelona contribuye a sanear el stock de oficinas de la ciudad. Respecto a la contratación, han aumentado el número de operaciones en el centro de la ciudad y ha vuelto el protagonismo de las pymes. En concreto, se han cerrado prácticamente el doble de operaciones de más de 3.000 metros cuadrados que en los dos semestres anteriores. El distrito barcelonés 22@ ha sido una de las zonas más receptoras de estas operaciones grandes en el primer semestre de 2014.
En el segmento de inversión, el volumen de transacciones ha alcanzado los 764 millones de euros en los primeros seis meses del año, en comparación con los 1.196 millones invertidos en Barcelona durante 2013. Sin embargo, el director de Inversiones de Aguirre Newman Barcelona, Carlos Bajo, ha advirtido que ?nos encontramos con una gran liquidez y presión compradora en un mercado con escasez de producto que está frenando claramente el número de operaciones cerradas, que podría ser superior?.
Las operaciones circunscritas por el uso hotelero, que en 2013 supusieron la mitad de todas las transacciones en términos de volumen, ocupa en estos primeros seis meses del año un porcentaje del 29 por ciento, siendo el segmento de oficinas el que ha experimentado un repunte más notable. Según Carlos Bajo ?se aprecia, además, un aumento inminente del residencial (16 por ciento), y en retail prime nos encontramos que prácticamente no existe producto de inversión?.