Los expertos que asesoran a Artur Mas en su empeño de llevar a Cataluña hacia la independencia lo tienen claro: la clave del proceso no es permanecer en la Unión Europa (UE) sino conservar el euro. Pese a este baño de realismo, el Consell Assessor per a la Transició Nacional (CATN), organismo que asesora al president, descarta que pudiesen existir problemas para mantener la moneda europea incluso si Cataluña saliera de la UE.
Según explicó ayer en rueda de prensa el presidente del CATN y exvicepresidente del Tribunal Constitucional, Carles Viver Pi-Sunyer, "sería conveniente para un nuevo Estado mantener el euro como moneda, ni que fuera por los costes muy difícilmente asumibles de cambiar de moneda". El informe presentado ayer indica que el mantenimiento del euro "sería absolutamente necesario".
Pese a ello, el mencionado informe prevé dos escenarios. El primero, en el que una Cataluña independiente se mantendría dentro de la Unión Europea y podría gozar de un puesto en el Banco Central Europeo. En el segundo, Cataluña quedaría fuera de la UE, pero el CATN recomienda a la Generalitat asumir igualmente el euro, aunque las entidades financieras no tendrían acceso directo al crédito del Banco Central Europeo. Según Viver Pi-Sunyer, esta cuestión se podría solventar con sucursales de las entidades en países miembros de la UE. El presidente del CATN considera que hay "ejemplos suficientes que no están en la UE y están utilizando la moneda única".
Un aspecto que tiene especial relevancia en el período de transición es el de la "liquidez" del nuevo Estado. En este sentido, los miembros del CATN consideran que los potenciales perjuicios derivados de una falta de acceso a los recursos monetarios serían "minimizados" finalmente por la propia UE, dados los propios intereses empresariales y comerciales en juego. Por este motivo, el informe cree razonable pensar que "la UE acabe actuando para evitar un escenario de tipo catastrofista", en la medida en que estos perjuicios afectarían a ciudadanos y empresas que son ya plenamente miembros de la UE.
Finalmente, el CATN considera que la UE acabará favoreciendo un acuerdo porque una estrategia contraria podría terminar proyectando una imagen negativa sobre "España y el conjunto de la economía española", ya que la solvencia de su deuda se debilitaría fuertemente y podría finalmente terminar afectando la credibilidad misma de la moneda común.
Reparto de la deuda española
En cuanto a la transmisión de la deuda pública del gobierno central, el CATN considera que "el Estado catalán no debería asumir la deuda territorializable contraída por el Estado español para hacer obras e inversiones fuera del territorio de Cataluña". En cambio, en el caso de la deuda no territorializable (aquel destinado a satisfacer los servicios comunes a todos los ciudadanos españoles, como por ejemplo el del ministerio de Defensa) habrá que "negociar previamente" el criterio de proporcionalidad en el reparto la deuda. Además exige el traspaso de activos públicos.