El Consorcio de la Zona Franca de Barcelona (CZFB) cerró 2013 con unos beneficios de siete millones después de dos años de pérdidas.
En un comunicado, el Consorcio ha dado cuenta de estas ganancias en un consejo plenario, presidido por el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, en el cual ha certificado el cierre de las cuentas del año pasado,
El CZFB ha precisado que ha generado unos beneficios de 11 millones de euros en el primer semestre del año, período en el que ha cerrado la venta de los edificios del Banco de Sangre y de la Torre Telefónica, por los que ha obtenido más de 145 millones.
El Consorcio ha subrayado que, gracias a los ingresos obtenidos por la venta de estos edificios, su intención es reducir su deuda y acometer las primeras inversiones en el polígono y en el barrio barcelonés de La Marina del Prat Vermell, en el distrito de Sants-Montjuïc.
Asimismo, el CZFB, cuyo delegado especial es Jordi Cornet, prevé continuar haciendo provisiones este año para ajustar el valor de sus terrenos.
El Consorcio adquirió antes de la crisis unos activos inmobiliarios por un valor contable de 130 millones, un precio que quedó "muy por encima del valor real de mercado".
El CZFB reflejó un valor contable de esos activos de 88 millones en 2013, por lo que tuvo que hacer las correspondientes provisiones.
En el comunicado, la empresa pública destaca que cerró 2013 con unos ingresos de 52,4 millones y que su endeudamiento a largo plazo con entidades financieras se sitúa en los 164 millones.
