La Generalitat potenciará la ubicación de librerías físicas en las bibliotecas para que actúen como "escaparates de reclamo" de las librerías de proximidad y también como tiendas abiertas a los usuarios, y que se materializará en una prueba piloto en bibliotecas de diferente tipología.
Las 360 bibliotecas y más de 400 librerías trabajarán juntas "a favor de la lectura mirándose un poco más y apoyándose un poco más directamente", ha explicado en rueda de prensa el conseller de Cultura, Ferran Mascarell, tras firmar un convenio con el presidente del Gremi de Llibreters, Antoni Daura, y acompañado por la jefa del Servicio de Bibliotecas de la Generalitat, Carme Fenoll.
Esto se materializará en una prueba piloto, en la que participarán 15 librerías y 15 bibliotecas, que "permitirá verificar cómo desarrollar y plasmar" estos objetivos, con el objetivo final de que las bibliotecas y las librerías se interrelacionen con un vínculo que puede ser muy útil para ambos, ha dicho.