El grupo israelí ICL, matriz de Iberpotash, invertirá más de 100 millones de euros en una nueva terminal de carga en el Puerto de Barcelona para exportar potasa de máxima calidad que se producirá en el municipio de Súria (Barcelona), según informó ayer el Puerto de Barcelona.
La inversión corresponde al traslado y ampliación de la actual terminal de carga para permitir la entrada de grandes barcos (de hasta 60.000 toneladas). Las nuevas instalaciones se ubicarán en la zona del Moll Álvarez de la Campa, con una superficie de siete hectáreas, 600 metros de línea de atraque y 14 metros de calado.
El Puerto invertirá además 10 millones para reformar los espacios que acogerán esta infraestructura, reforzando el muelle y aumentando su calado hasta los citados 14 metros, así como prolongando la red viaria y ferroviaria hasta la nueva terminal. Las obras empezarán el primer trimestre de 2014 y que la terminal empiece a operar en 2015. ICL trabaja desde hace tiempo para mejorar sus conexiones ferroviarias desde las minas de sal y potasa de Súria, y su plan industrial contempla la circulación de más de 200 vagones diarios entre Súria y el Puerto de Barcelona a partir de 2015.
Asimismo, Iberpotash tiene en marcha el plan Phoenix en la comarca del Bages, que implica una inversión de 160 millones incluyendo la construcción de una planta de sal vacuum y una nueva rampa de acceso a la mina de Cabanasses en Súria.