La Generalitat avanza hacia la creación de su banco público. El Ejecutivo de CiU dio luz verde ayer a un decreto ley por el que se autoriza al Institut Català de Finances (ICF) a que siga los pasos necesarios para transformarse en el banco público catalán.
"Fruto de estos cambios legislativos, el ICF se podrá constituir en una sociedad anónima, segregando su actividad financiera, con plena independencia de la Generalitat y de sus entidades", según anunció ayer la Generalitat. La creación de un banco público es una de las exigencias de ERC para dar apoyo al Gobierno de CiU contemplado en los acuerdos de gobernabilidad que ambos partidos firmaron a finales de 2012.
Fase incipiente
El proceso de constitución de ese futuro banco está todavía en fase incipiente y con el acuerdo de ayer se modifica la normativa para que el ICF (embrión del futuro banco) se adecue a la normativa bancaria. El objetivo es que el ICF pueda actuar como entidad de crédito en el marco de Unión Bancaria Europea y fortalecerse como "instrumento de apoyo al tejido empresarial y a la economía productiva", según explicó ayer el consejero portavoz de la Generalitat, Francesc Homs. El nuevo banco, en caso de ser autorizado, estará sujeto a la normativa propia de las entidades de crédito y al control de los órganos reguladores estatales y europeos.
El futuro banco no tiene ficha bancaria, pero desde el ICF anticipan que, de la misma manera que el resto de entidades, será el Banco de España el encargado de autorizarla.
El Instituto Catalán de Finanzas (ICF) fue fundado en 1985 con el objetivo de facilitar el acceso a la financiación al tejido empresarial con sede en Cataluña, principalmente pymes y autónomos, actuando como complemento del sector financiero privado. El Instituto ofrece a las empresas diversos productos y servicios vinculados a la financiación empresarial, centrados en la actividad de préstamos y avales y en la actividad de capital riesgo. Para llevar a cabo su actividad el ICF se financia en los mercados nacional e internacional. Sus recursos no provienen de los presupuestos de la Generalidad de Cataluña
Oxígeno para las finanzas
Por otro lado, las finanzas de la Generalitat han logrado un nuevo balón de oxígeno. CaixaBank ha decidido refinanciar un bono de 1.000 millones de euros de la administración catalana que vencía este mes. El acuerdo establece un plazo de nueve meses (con vencimiento 31 de julio de 2014) con un cupón del 3,487%. El anterior bono, que refinanció igualmente en mayo pasado, tenía un interés del 2,97%. Según detalló la Consejería de Economía, este bono está asociado a una línea de crédito en la que participan diversas entidades (CaixaBank, Catalunya Banc y BBVA) que gestionan la tesorería de la Generalitat.
Otro de los grandes compromisos en materia de deuda de la Generalitat se producirá el mes que viene, el próximo 21 de noviembre, cuando vencen 1.581,4 millones de euros de una colocación para particulares que se emitió en el 2011 a dos años y un interés del 5,25% del que se hará cargo el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA).
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