
Desde el inicio de la crisis económica, en verano de 2007, se han destruido 567.099 puestos de trabajo en Cataluña, que representan el 16,86% del total.
Según los datos de un informe de la UGT, en verano del 2007 en Cataluña existían 3.363.531 puestos de trabajo, entre el Régimen General de la Seguridad Social y el Régimen de Autónomos y el mes de junio del 2013 esta cifra se había reducido hasta los 2.812.072 puestos de trabajo.
Desde el inicio de la crisis, la destrucción de ocupación sigue en caída libre y continuada y un año después de la Reforma Laboral se continúa destruyendo ocupación con el mismo ritmo, resultados que contrastan con los optimistas mensajes de los gobiernos del Estado y de la Generalitat de Cataluña sobre la evolución positiva de la creación de ocupación en los últimos meses.
Tal y como se recoge en el estudio, "la Reforma Laboral, así como el resto de reformas y recortes impuestos por la Troika, han demostrado no sólo que son del todo inútiles e injustas, sino que además nos condenan a un futuro más cercano a la realidad del siglo XIX que a la del siglo XXI".
Por sectores, la crisis ha afectado especialmente a la construcción, donde se ha destruido el 57,5% de la ocupación (un total de 227.816 puestos de trabajo). Detrás la construcción viene la industria, con la desaparición de 171.318 puestos de trabajo, que suponen un 28,1% del sector. Por su parte la agricultura, a pesar de tener poco peso en el conjunto, como sector ha perdido un 24,5%, es decir, 10.667 puestos de trabajo.