Rocada inició sus primeros pasos en 1976 cuando Josep Roca empezó fabricando mesas de dibujo para arquitectos. Años más tarde optó por diversificar su oferta con la producción de muebles de oficina y pizarras, producto este último que sigue siendo a día de hoy su principal caballo de batalla.
Las pizarras de Rocada, que se fabrican en Taradell (Osona), tienen presencia internacional en más de 50 países y han ido evolucionando a lo largo de los años. "Hay que reinventar la pizarra tradicional, diferenciarse y aportar un valor añadido" apunta el director general de la empresa, Marc Roca, que está al frente del negocio que fundó su padre.
En Barcelona fabrican 50.000 pizarras al año y el 70 por ciento de su producción se vende en el exterior. A las filiales que tiene en Alemania y Reino Unido se ha sumado recientemente una en China, mercado que han empezado a abordar. Tal y como reconoce Roca, en este país es difícil competir por precio ya que allí se fabrica de todo y muy barato, y la única manera de triunfar es aportando valor añadido a lo que vendes. Esta es la vía por la que ha apostado Rocada, que ha patentado dos nuevas referencias con las que confía entrar con fuerza en nuevos países.
Con una inversión de 300.000 euros, la compañía ha patentado dos novedades. Una de ella es una pizarra de pared modular única en el mercado que se adapta a la medida deseada ya que se fabrica sin marco, lo que permite unir varias piezas. Además de proporcionar un ahorro de stock a los distribuidores al no tener que disponer de pizarras de todos los tamaños, permite un ahorro económico al consumidor final ya que tal y como afirma Roca, "las pizarras tradicionales, cuanto más grandes son, salen más caras, mientras que cada módulo de 80 centímetros por 120 centímetros cuesta 59 euros".
Venta global
La compañía también ha lanzado al mercado una pizarra móvil con ruedas que se convierte en mesa, sobre la que se puede escribir con un rotulador.
Roca espera que estos nuevos inventos repercutan en la facturación del próximo año ya que ha cerrado su primer acuerdo global con un distribuidor que tiene presencia en más de 10 países europeos. "Este acuerdo comportará grandes pedidos de nuestras dos últimas referencias para venderlas en los establecimientos que tiene distribuidos por Europa", añade Roca.
En España, Rocada cuenta con más de 1.500 clientes entre los que se encuentran tiendas de mobiliario de oficina y papelerías, siendo este último el sector con más peso. Un equipo de 50 personas integra la plantilla de la compañía, que tras facturar ocho millones de euros en 2012, espera incrementar esta cifra hasta los 10 millones en 2014.