Jotun Ibérica, la marca de pinturas de origen noruego, ha celebrado hoy el 50 aniversario de su llegada en España. El presidente de la Generaliat ha visitado las instalaciones animando al sector a adaptarse a las necesidades del mercado.
La compañía de origen noruego, que el año pasado facturó más de 37 millones de euros, es referente en I+D y líder en color en el mercado español.
La marca de pinturas ha celebrado este viernes 50 años desde su llegada en España. La compañía, con sede en Catellbisbal (Barcelona), cuenta actualmente con un equipo de más de 120 empleados a nuestro país, y se ha consolidado a lo largo de estos 50 años como una de las empresas más innovadoras del sector.
El acto ha sido presidido por Artur Mas, presidente de la Generalitat de Cataluña, y ha contado con la participación de Conxi Llurba, alcaldesa de Catellbisbal; Fernando Brea, delegado del Gobierno de la Generalitat en Barcelona; y Karin Möll-Christensen, cónsul de Noruega, entre otras autoridades.
Para el director general de Jotun Ibérica, Christian E.Johnson, ?por Jotun es un orgullo poder celebrar una fecha tan significativa como esta, especialmente en un momento difícil para todo los sectores vinculados a la construcción. España fue el país elegido hace 50 años para abrir la primera filial de Jotun en Europa, y seguimos creyente en el potencial del mercado español. Nuestros resultados avalan las claves de la gestión de Jotun, que está centrada en la I+D en productos y en una implicación total de nuestros empleados en todas las fases de desarrollo y comercialización de nuestros productos.?
En su intervención durante la celebración, el presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, ha destacado: ?Las necesidades de la sociedad cambian mucho prisa y entender bien hacia donde va el mercado, y saber adaptarse a la situación de cada momento es la clave para hacer bien las cosas y mejorar. Jotun se un claro ejemplo de esto?
Desde su creación, Jotun Ibérica ha experimentado un crecimiento constando que, en 2000, trajo a la compañía a inaugurar una nueva fábrica de 21.000 m² en Catellbisbal (Barcelona) con capacidad para producir 21 millones de kilos de pintura anuales. Diseñada para satisfacer la demanda del sur de Europa y norte de África, la planta es también la sede central a nivel mundial de la división de pinturas náuticas.