El PP catalán se alineó ayer con los partidos políticos que consideran que la mayor urgencia de Cataluña es conseguir un nuevo sistema de financiación autonómica que garantice su viabilidad económica.
La presidenta de los populares catalanes, Alicia Sánchez-Camacho, afirmó que defenderá "hasta el final" un modelo de financiación singular para Cataluña, dentro del régimen común de las autonomías, y no descartó romper la disciplina de voto de su partido en el Congreso en este asunto si no se acepta su propuesta.
Sánchez-Camacho aseguró en una entrevista en Catalunya Ràdio que su partido "defenderá hasta el final este modelo, valorando todas las consecuencias" y que estaría dispuesta "incluso" a romper la disciplina de voto, tal y como hizo el PSC con el PSOE en el Congreso. "Es una de las cosas que podríamos considerar", afirmó. Su temor es que cuando ponga sobre la mesa el modelo de financiación singular, asimétrico y con una solidaridad limitada y finalista que defiende para Cataluña, algunos barones del PP torpedeen su propuesta. A éstos les pide que dejen de cuestionar las propuestas que se lanzan desde Cataluña y se centren en defender el modelo de financiación que consideren mejor para sus comunidades autónomas.
La líder de los populares también pidió al presidente catalán, Artur Mas, que entre en razón y que centre sus esfuerzos en negociar el nuevo modelo de financiación autonómica que debe entrar en vigor el 1 de enero de 2014. Para ello, le instó a romper con ERC y a buscar otros aliados para aprobar los presupuestos catalanes de 2013.
Sánchez-Camacho criticó la "poca seriedad" del líder de ERC, Oriol Junqueras, por no aceptar unos presupuestos con un déficit del 1,5 por ciento del PIB cuando tiene un pacto de legislatura con CiU que incluye apoyar las cuentas. Además, recordó que los republicanos son, en parte, culpables de la mala situación financiera de la Generalitat por su gestión durante el tripartito. La presidenta del PPC también afirmó que ve en el Gobierno central una predisposición a flexibilizar el déficit para Cataluña.
La reacción del Gobierno
La vicepresidenta y portavoz del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, respondió ayer a las declaraciones de Sánchez-Camacho y aseguró que la reforma de la financiación autonómica se llevará adelante "entre todas" las autonomías en el marco del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) y avisó de que se eviten "apriorismos".
La vicepresidenta también respondió a la posibilidad de que se transfiera todo el impuesto del IRPF a las autonomías, una posibilidad apuntada por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo. Sáenz de Santamaría admitió que el ministro cuenta con amplios conocimientos sobre financiación autonómica, pero que la decisión final depende del CPFF.
Por su parte, el presidente catalán Artur Mas hizo un nuevo llamamiento al PSC para que entre a formar parte de un Gobierno de unidad nacional en la Generalitat.