Los farmacéuticos catalanes se manifiestan esta mañana en el centro de Barcelona para protestar por los impagos de la Generalitat.
El Consejo de Colegios Farmacéuticos de Cataluña ha convocado esta medida en la plaza Sant Jaume, como una de las acciones que han votado en referéndum y que incluye también la reclamación judicial de los intereses generados con los retrasos y una recogida de firmas.
La secretaria del Consejo de Colegios de Farmacéuticos de Cataluña, Pilar Gascón, ha recordado la reivindicación de los boticarios, y ha clamado contra el hecho de que "no se cumpla lo que está establecido, y es la fecha de pago".
Las farmacias catalanas cobran actualmente las medicinas que cubre la sanidad pública a unos 120 días después de dispensarlas, frente a los 35 días que especifica el convenio firmado con la Generalitat en 2010.
El pasado jueves, la Consejería de Salud abonó el 30% de la deuda correspondiente a enero de este año --108,6 millones de euros--, y que tiene previsto pagar el 70% a finales de mes, mientras que no existe todavía fecha para abonar las cantidades correspondientes a noviembre y diciembre.
Los farmacéuticos se han reunido también con las patronales sanitarias La Unió Catalana d'Hospitals y el Consorci Sanitari, con el objetivo de elaborar un manifiesto conjunto en el que evidencia el riesgo que atraviesa el sistema sanitario catalán.
Las tensiones de tesorería ya provocaron el pasado 25 de octubre el primer cierre patronal total de la historia de la farmacia catalana, a quien el Servicio Catalán de la Salud (CatSalut) adeuda 302,7 millones de euros.