Juego de nervios entre la dirección de Nissan, el Gobierno, la Generalitat catalana y los sindicatos CCOO y UGT. Mientras que el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, y los máximos dirigentes de CCOO y UGT en Cataluña se mostraron ayer confiados en que Nissan acabará adjudicando a su planta de Barcelona la fabricación del nuevo modelo, los portavoces españoles de la multinacional japonesa aseguran que ya es demasiado tarde y que la planta de la Zona Franca no recibirá el automóvil deseado.
Tras participar en el simposio sobre sostenibilidad energética Funseam en Barcelona, José Manuel Soria se mostró confiado en que la fábrica de Barcelona conseguirá el nuevo vehículo que está en liza, tras "la buena noticia" de la asamblea de trabajadores.
El pasado sábado, los trabajadores de factoría de Barcelona aceptaron en asamblea una propuesta de CCOO y UGT que permitiría reabrir la negociación. Dicha propuesta, que pasa por aceptar la exigencia de la dirección de crear una doble escala salarial para reducir costes laborales, facilitaría que la planta se adjudicara un nuevo vehículo (su primer turismo), lo que crearía mil puestos de trabajo directos, generaría unas inversiones de 130 millones y garantizaría el futuro de la fábrica.
Según Soria, "veo la mayor y mejor predisposición por las dos partes para llegar a un acuerdo. Así lo espero y lo deseo". Sin embargo, ayer mismo un portavoz de Nissan enfrió las expectativas y señaló que hoy por hoy "el coche no está en Barcelona" y que su adjudicación depende del comité de decisión de la multinacional, que tiene su sede central en Japón.
La dirección de Nissan aseguró que la propuesta aprobada esta fin de semana por los afiliados de CCOO y UGT para desbloquear la negociación "llega tarde".
Las demandas de la empresa
Nissan asegura que sólo firmará un acuerdo con UGT y CCOO si su planteamiento está "alineado" con el que ya firmaron la pasada semana la dirección y SIGEN-USOC, el sindicato mayoritario en la planta de Barcelona. La propuesta de CCOO y UGT garantiza una reducción de los costes para hacer competitiva a la fábrica catalana frente a otras plantas del grupo y, al mismo tiempo, que los trabajadores más antiguos no serán sustituidos por nuevos contratos más baratos.
También ayer, una delegación de las centrales entregaron al secretario de Empresa y Empleo de la Generalitat, Ramon Bonastre, mediador en la negociación, la propuesta de reducción de costes que han elaborado conjuntamente.
De momento, los dirigentes sindicales desconocen si Nissan intentará volver a reunirse en una mesa de negociación o simplemente enviará la propuesta sindical a Japón para que sea tenida en cuenta a la hora de adjudicar el nuevo modelo.
"Ya no existe nada que justifique que la empresa se eche atrás en su propuesta inicial (de fabricar el nuevo turismo en la Zona Franca). Si decide que 'no', será por otras razones que no tienen nada que ver con la competitividad de la fábrica", aseguró el secretario de CCOO en Cataluña, Juan Carlos Gallego. El secretario de UGT, Pepe Álvarez, destacó el carácter unitario de la propuesta sindical.