El coste del adelanto electoral supondrá para las arcas públicas catalanas un total de 26 millones de euros, según las propias estimaciones que hizo la Generalitat en los comicios de 2010.
A esta cifra habrá que sumar el coste de las campañas de cada partido, cuyo límite legal es de 3,5 millones. En las últimas elecciones, CiU gastó en sus campaña 3,2 millones; el PSC, 2,9 millones; el PP, 2,85 millones; ERC, 1,57 millones, y Ciutatans 0,25 millones. Ayer, el secretario general de ICV, Joan Herrera, propuso al presidente de la Generalitat realizar ?un ?mailing? común para todos los partidos que permitiría ahorrar? y dar ?ejemplo de austeridad a los ciudadanos?.