Cataluña

Artur Mas exige la soberanía fiscal para que Cataluña 'tire' de España

Artur Mas, president del Govern de la Generalitat de Catalunya. Foto: archivo

El presidente de la Generalitat, Artur Mas, armó ayer un discurso ante los empresarios del Círculo de Economía para intentar convencerles de las bondades del pacto fiscal como palanca de crecimiento para lograr salir de la crisis económica que les asedia. Carod-Rovira: "España aceptará antes una Cataluña independiente que un pacto fiscal".

Los empresarios catalanes, más preocupados por la prima de riesgo y por las dificultades de financiación que sufren para desarrollar su actividad, consideran que las opiniones soberanistas de CIU perjudican la credibilidad de España y, en consecuencia, a la economía española.

Mas dio la vuelta a este argumento y aseguró que "el pacto fiscal es reclamar los recursos para que nuestro modelo económico, el modelo productivo, salga adelante" y se preguntó si "alguien cree que si Cataluña no sale adelante, España podrá salir sola de la crisis".

El president aseguró que "el empresariado catalán representa la reserva de la economía productiva del sur de Europa frente un modelo financiero de gasto y crédito desmesurado que ha fracasado".

Considera que Cataluña aúna en su modelo a la industria exportadora, que es el 28% de las exportaciones españolas; al triángulo turismo, cultura, gastronomía; al 22% de las empresas innovadoras; a escuelas de negocio y a uno de los mejores modelos sanitarios. Mas explicó que Cataluña ocupa en la actualidad el puesto 47 entre las 271 regiones que hay en Europa. Madrid, País Vasco y Navarra están por delante. "Madrid es capital de Estado, pero País Vasco y Navarra están por delante porque tienen más dinero para desarrollar su modelo económico", añadió.

Lo que pretende la Generalitat es que Cataluña recaude los impuestos y "financie al Estado por las competencias que siga ejerciendo más las cuentas de solidaridad que nos corresponda".

En su opinión, la demanda de soberanía fiscal para Cataluña es en el fondo un debate sobre soberanía, igual que lo es hablar de soberanía española, italiana o flamenca. "¿Por qué es una incomodidad hablar de soberanía catalana y de otras no? El debate de la soberanía siempre estará presente y reclamamos el derecho a poder hablar.

En Cataluña hay país y hay nación por la historia y por la voluntad de la gente", argumentó. También señaló que "estados federales alemanes como Baviera se enfrentan a la represión fiscal de Berlín, al que acusan de malgastador, y no se plantea como un problema de soberanía "

Crisis de credibilidad

Respecto a la situación de España, aseguró que "tenemos un problema de falta de credibilidad, más que de fundamentos económicos". En su opinión, el país debe recuperar su credibilidad, reconocer sus debilidades y aplicar medidas de ajuste, pero "una vez el país sea creíble y reconozca sus debilidades, luego hemos de tener alguna contrapartida. Debemos tener liquidez asegurada. No podemos vivir con la angustia de no saber si podremos afrontar los pagos de nuestras obligaciones. Eso afecta a la economia real. Al empleo. Pagar puntualmente es clave".

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