Han defendido un modelo totalmente bilateral y que implique que Cataluña recaude y gestione todos los impuestos, aunque abran la puerta a que entre en vigor de forma progresiva y a que jurídicamente no se base en "derechos históricos".
El comité de asesores económicos del Gobierno catalán ha pedido el máximo consenso "político y social" en Cataluña para lograr que el pacto fiscal sea una realidad, cogiendo como referente el modelo foral que existe en País Vasco y Navarra.
Así lo han expresado los miembros del Consejo Asesor para la Reactivación Económica y el Crecimiento (Carec) en un informe sobre cómo debe ser una nueva financiación catalana, que este viernes han entregado al presidente de la Generalitat, Artur Mas.
Han defendido un modelo totalmente bilateral y que implique que Cataluña recaude y gestione todos los impuestos, aunque abran la puerta a que entre en vigor de forma progresiva y a que jurídicamente no se base en "derechos históricos".
Según el Carec, la crisis económica ha puesto de manifiesto que el modelo actual presenta "carencias de racionalidad y eficiencia", y además no implica un sistema basado en la equidad.
Aprecia que el modelo que plantea el Gobierno catalán, sin salir de la Constitución, no atenta contra la cohesión territorial en España, ya que, a diferencia de Euskadi y Navarra, habrá aportaciones a la solidaridad con las autonomías menos dinámicas. PIDEN UN SISTEMA "RACIONAL"
Según el Carec, más que una reivindicación, Cataluña necesita una financiación "racional" que además de darle plenas competencias en la gestión y recaudación de impuestos, le permita velar por la cohesión social y la recuperación económica.
El modelo actual es discrecional porque depende demasiado de criterios políticos y no técnicos y territoriales y además, del todo insuficiente ya que, además de no implicar para la Generalitat responsabilizarse de los ingresos, no permite a Cataluña "disponer de unos recursos más proporcionales a su capacidad económica", añade.
Recalca además que el sistema actual homogeneiza a Cataluña e impide a la Generalitat tener las capacidades financieras necesarias, por lo que, ante los ajustes, el equipo de Artur Mas "sólo puede actuar, mayoritariamente" reduciendo gasto.
Han defendido un modelo bilateral para lograr que las autonomías más dinámicas "puedan hacer un mayor esfuerzo en favor del crecimiento económico" manteniendo una solidaridad interterritorial que periódicamente se revise y con criterios transparentes. RECHAZO AL 'CAFÉ PARA TODOS'
El texto hace también un alegato en contra del 'café para todos': "Las aspiraciones de Cataluña a un mayor techo competencial y de autogobierno se vieron limitadas por la dificultad de hacerlas extensivas a todas las autonomías".
Recalca también que con un pacto fiscal, se facilitaría "el acceso a los mercados financieros, ya que, cuando una administración tiene plenos poderes tributarios, su solvencia sube considerablemente".
El Carec, que preside Salvador Alemany (Abertis), es un órgano que asesora el Gobierno catalán, y con esta propuesta, respalda las tesis sobre financiación que durante el último año viene defendiendo el gabinete liderado por Mas.