La entidad catalana valora en 980 millones sus activos y se convierte en líder del sector españolEl grupo navarro-andaluz se quedará sólo con poco más del 6% del capital de Caixabank
La Caixa formalizó ayer la oferta de compra de Banca Cívica, que necesita una fusión al no continuar en solitario ante las exigencias de la reforma financiera. Los consejos de administración de ambas entidades aprobaron ayer la operación, que consiste en el lanzamiento de una oferta de adquisición a través de un canje de acciones, con una rebaja sobre el precio de cotización actual del grupo creado por Caja Navarra, Cajasol, Canarias y Municipal de Burgos de un 11,2 por ciento y del 27 por ciento desde su debut en bolsa. Ha ofrecido 1,97 euros por cada acción, es decir, ha fijado en 980 millones de euros su valoración.
Durante toda la jornada de ayer estuvo suspendida de negociación en el mercado para evitar una perturbación de su valoración. El precio ofrecido por La Caixa supone además un decuento del 84 por ciento sobre su valor en libros, superior al que tuvo que aceptar en su salida a bolsa, en verano pasado, cuando vendió el 45 por ciento a inversores institucionales y clientes con una rebaja del 73 por ciento.
Los accionistas de Cívica que acudan a la operación recibirán cinco títulos de Caixabank -filial financiera de la caja catalana- por cada ocho. En principio, acumularán unas pérdidas latentes del 27 por ciento si acudieron al debut bursátil del grupo navarro-andaluz, pero los expertos destacan que a partir de ahora formarán parte de una entidad más solvente, cuyo potencial alcista es mayor.
El proyecto convertirá a caja catalana Caixabank en la mayor entidad que opera en España, con un volumen de activos de más de 342.000 millones. Supera así a BBVA. el Santander y Bankia. No obstante, el ranking podría variar en los próximos meses debido a los movimientos que se avecinan, con la subasta de CatalunyaCaixa y Banco de Valencia antes del verano, y la eventual puja de Novagalicia en otoño si no se adelanta.
La operación la realizará a pulmón. Es decir, no recibirá ayudas públicas -Frob- ni del sector -Fondo de Garantía de Depósitos-, a diferencia de otras integraciones. Además, asumirá el coste de los 977 millones que percibió Cívica para su creación. Hasta ahora, La Caixa había permanecido al margen de las grandes operaciones corporativas. En el proceso de reestructuración sólo ha tomado la pequeña Caixa Girona y Bankpyme, ambos radicados en Cataluña.
Tras la absorción, las cajas de Cívica se convertirán en fundaciones al ostentar entre un 6 y un 7 por ciento del capital de una entidad, Caixabank, fruto del canje, por lo que su contribución a la obra social dependerá del dividendo que pague esta última.
Durante el fin de semana las negociaciones han sido intensas. Fuentes conocedoras del proceso señalan que los máximos responsables de Cívica intentaron convencer a La Caixa de que ofreciera un precio mayor, en torno a la cotización de los últimos días, por encima de 2,22 euros. Sin embargo, la catalana no cedió a las pretensiones.
La operación tiene que ser aprobada por los consejos de administración de todas las cajas partícipes de Cívica. Al cierre de esta edición, algunos órganos de gobierno aún no habían acabado tras más de cuatro horas de deliberaciones. El precio y la situación de Cívica fue uno de los aspectos que más conflicto ocasionó en el seno de algunos consejos.