La propuesta de la Generalitat recoge que ningún trabajador cobre menos de 26.000 euros y un plazo de dos años para hacer efectivo el recorte salarial, así como 35 prejubilaciones.
Asimismo, no habará incremento salarioal durante los años 2011 y 2012. Panrico no podrá cerrar la fábrica de Santa Perpétua en cuatro años.
La Dirección General de Relaciones Laborales de la Generalitat ha enviado la mañana de este jueves una propuesta a la dirección de Panrico y a los sindicatos que pretende contentar a ambas partes proponiendo rebajas salariales y 35 prejubilaciones para salvar la planta de Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona).
Panrico planteaba un recorte salarial que oscilaba entre los 50 y 1.000 euros en función del trabajador, mientras que CC.OO., fuerza sindical mayoritaria en la planta de Santa Perpètua pero no en el comité intercentros, rechazó el recorte y propuso un plan de prejubilaciones para 50 trabajadores de la planta, los que cuentan con más antigüedad y con más complementos salariales, lo que supondría un ahorro de 1,7 millones.
La propuesta de la Generalitat recoge que ningún trabajador cobre menos de 26.000 euros y un plazo de dos años para hacer efectivo el recorte salarial, así como 35 prejubilaciones.
En cuanto a la jornada laboral, la dirección propuso un aumento del 20% --hasta cerca de las 1.600 horas anuales desde las más de 1.300 actuales--, un deseo contemplado por la Generalitat, pues en su propuesta consta una jornada de 1.640 horas.
Fuentes de Panrico han explicado a Europa Press que la propuesta puede experimentar algunos cambios técnicos de naturaleza jurídica, y han indicado, que, si bien la propuesta del Govern no recoge todos sus requisitos, la aceptarán.
Los trabajadores de la planta votarán el próximo martes en referendo si aceptan o no la propuesta, aunque su negativa conllevaría que Panrico presentase una Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectaría a los 464 trabajadores de la fábrica.
Los contactos entre sindicatos y Panrico se han ido tensando y a pesar de que el acuerdo parecía inminente se ha ido retrasando desde noviembre, a la espera de que la semana que viene se aclare el futuro de la planta y de los trabajadores.