Cuando el Ayuntamiento de Barcelona les explicó que la retirada de chicles de la acera era uno de sus principales problemáticas de limpieza, IPL se puso manos a la obra. Así, en poco más de seis meses, esta compañía catalana especializada en limpieza de grafitis ha desarrollado un innovador sistema que permite eliminar los chicles en seco y "con garantías ecológicas".
La compañía, según afirma su director de marketing, Antoni Barba, ha invertido unos 100.000 euros en la creación del producto. "Creemos que el equipo costará menos de 3.000 euros", explica, y añade: "Puede hacer aumentar enormemente nuestra facturación". IPL ha facturado este año 2,5 millones de euros, y este nuevo lanzamiento podría suponer un incremento de las ventas de hasta un millón de euros. Por el momento, la compañía trabaja en aumentar su presencia dentro de España y, en dos años, estudia dar el salto a Latinoamérica. Su principal cliente son las Administraciones Públicas, que generan el 98 por ciento de su facturación. Fundada en 1989, la compañía acaba de ampliar su sede, ubicada en Sabadell.
