La Generalitat ha pagado este mes a los funcionarios entre 400 y 600 euros menos del importe normal de las nóminas, según denuncian los sindicatos de la función pública. El motivo es que sobre la nómina de diciembre se ha retenido el IRPF de la paga extra, una paga que no se abonará hasta el próximo 28 de diciembre y de la que sólo se hará efectivo un 80%.
El Gobierno catalán ha aplicado una deducción por un pago que aún no ha cobrado a los funcionarios y que, muy probablemente, no percibirán en su totalidad hasta 2012. Esta situación afecta a los 23.000 funcionarios.
La Generalitat justifica el descuento del IRPF en la nómina de diciembre por motivos fiscales e informáticos .Al parecer, el sistema informático no permite reprogramar las retenciones, que se aplican en estas fechas, y no había tiempo de cambiarlo. El día 28 de este mes la administración abonará parte de la paga extraordinaria sin retenciones fiscales.
Fuentes sindicales, sin embargo, atribuyen esa decisión a los apuros de la tesorería catalana y a una fórmula para ganar liquidez. Los sindicatos han calificado este hecho de "inaceptable". El sindicato mayoritario del cuerpo de Mossos d'Esquadra, SAP-UGT, ha tildado de "falta de respeto" a los profesionales de la función pública lo sucedido con la nómina de diciembre, lo que ha provocado ?un gran malestar? en la policía autonómica. El sindicato de Justicia STAJ estudia interponer una querella contra el Govern por "apropiación indebida" de los salarios de los trabajadores y la denuncia ante Hacienda por retener un IRPF de cantidades que todavía no se han cobrado.
