Por primera vez en décadas el negocio en España dio pérdidas.
Cementos Molins ha visto como las ventas de cemento en España han pasado de 52 millones de toneladas en 2007 a sólo 24,5 millones en 2010 y este año el consumo sigue bajando. La situación es tan delicada que por primera vez en décadas la compañía ha tenido en el mes de abril un beneficio operativo negativo (ebitda). "Coincidió la Semana Santa, pero la situación es preocupante", explicó el presidente de la compañía, Joan Molins. En su opinión, la crisis del sector de la construcción durará hasta 2013 y "después ya veremos".
Ante esta coyuntura tan desfavorable en España, el grupo ha apostado por la internacionalización y por recuperar la exportación de cemento mediante barco, algo común hace 20 años, pero ahora no. Los planes de crecimiento pasan por potenciar los mercados donde Molins tiene fábricas y logra casi el cien por cien de sus beneficios que son: México, Argentina y Uruguay. "Allí estamos viviendo un milagro económico", asegura Molins. Los 191 millones de inversión previstos por la empresa para 2011 se destinarán a estos países más Túnez. De la cifra total, a España sólo le corresponden 25 millones.
También buscará nuevos mercados. La compañía acaba de poner en marcha una empresa de prefabricados en China, con un inversión de dos millones, y busca oportunidades de negocio en Qatar. En Bangladesh, el grupo quiere reemprender la producción en julio.