
La ministra de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, ha asegurado este miércoles que el Ministerio "ha empezado a tramitar" un Decreto de sequía para la cuenca del Duero.
Así lo ha explicado este miércoles la ministra durante la presentación en Madrid del Concurso Mundial de Bruselas, que se celebrará en Valladolid entre el 5 y el 7 de mayo.
Ante la pregunta de los medios de comunicación sobre la situación de sequía en Castilla y León, García Tejerina ha reconocido que pasan los días y se sigue "mirando al cielo" ante la falta de lluvias y que el Ministerio ha empezado ya a tramitar un Decreto de sequía para la cuenca del Duero, donde varios ríos, principalmente el Carrión y el Órbigo, presentan situaciones preocupantes.
A este respecto, la portavoz de la Junta y consejera de Agricultura y Ganadería, Milagros Marcos, ha asegurado que el Gobierno de Castilla y León pedirá "todo lo que sea posible" ente la próxima aprobación ministerial del Decreto de sequía, una "situación excepcional" que se está dando este año y que, según ha reconocido la consejera, afecta a todo el país con zonas igual o más afectadas que en la Comunidad.
Marcos ha considerado que las tres próximas semanas serán "decisivas" para el desarrollo de esas producciones y ha abogado por poder adelantar riegos en cultivos como los cereales para que puedan salir adelante.
Respecto a la próxima orden ministerial de sequía, ha esperado que pueda beneficiar y cubrir las necesidades tanto de los cultivadores de secano como de regadío con medidas que puedan ayudar a superar esta "difícil situación" y entre las que ha citado la reducción en los módulos del IRPF, mecanismos de activación de seguros o facilidades para los avales, a lo que ha añadido que la Junta trabaja con la CHD para contemplar también medidas para la ganadería, como han reclamado las OPA.
"Estamos trabajando en ello y será lo más completa posible", ha augurado la consejera de Agricultura y Ganadería quien ha reconocido que tiene que ser el Ministerio de Agricultura y las confederaciones hidrográficas las que analicen el control del agua, "un bien muy preciado" que ha abogado por utilizar mejor a través de infraestructuras de modernización que favorecen el ahorro hídrico.