Ribera del Duero entra en el turismo termal. El monasterio de Santa María de Valbuena, un edificio cisterciense construido en el siglo XII y que acoge la sede de la Fundación Las Edades del Hombre, será a partir de abril de 2015 un lujoso hotel balneario de cinco estrellas.
El proyecto de este exclusivo complejo turístico será una realidad tras una inversión total de 13,5 millones de euros, en la que entra por primera vez Alentia Capital Alternativo, la sociedad de inversión privada creada por empresarios familiares de Castilla y León. Alentia, tendrá una participación de un 20 por ciento tras desembolsar 1,2 millones de euros.
Los detalles de la iniciativa, para la que se ha negociado una cesión por 50 años con el Arzobispado de Valladolid y la Fundación Las Edades del Hombre, los ofrecieron este miércoles el presidente y director general de Castilla Termal, Roberto García, acompañado del presidente de Alentia Capital, Sebastián Arias, y el director gerente, Javier Cid.
El hotel será el primero de España, con categoría de cinco estrellas, ubicado en un monumento, que está declarado Bien de Interés Cultural (BIC) y Bien de Interés Artístico.
Roberto García ha destacado que "el lugar, los muros, las piedras, el corazón de la Ribera del Duero serán elementos diferenciadores respecto a otros hoteles balnearios".
El complejo contará con 18.000 metros cuadrados construidos y con 80 habitaciones, de las que el 75 por ciento tendrán categoría superior y suite. "Cada habitación tendrá su carácter, todas son diferentes?, ha dicho Roberto García.
La zona termal se situará en un edificio nuevo "para no competir" con la visión histórica del recinto monacal. Serán 2.000 metros cuadrados con 16 cabinas para tratamientos, circuito de contrastes y piscina infantil. Todo ello, con aguas biomedicinales hipotermadas y con efectos sedantes. "Es un agua que nos dará muchas satisfacciones? ha dicho el director general de Castilla Termal.
Dispondrá además de un área de restauración -con cafetería, restaurante y salones para eventos con capacidad para 350 personas- en los que primarán los productos de la tierra y los vinos de Ribera. Castilla Termal dispondrá también de un viñedo de 4,5 hectáreas colindante al monasterio, así como un huerto ecológico y un jardín de especias.
Con este complejo, Castilla Termal se convertirá en "la primera cadena de turismo termal de España", ya que será su cuarto balneario, junto al que ya posee en el monasterio del siglo XII de Olmedo, el Hotel Termal de El Burgos de Osma (Soria), y el de Solares (Cantabria). "Nos hemos convertido en los paradores del agua. Es un privilegio contar con estos edificios y poder hacer esto", ha destacado García.
El presidente de Alentia, Sebastián Arias, ha destacado que se trata de un "magnífico y rentable" proyecto que enseguida atrajo el interés de los socios de la sociedad de inversiones, que aportarán 200.000 euros más del millón de euros que en principio se requerían.
La aportación se sitúa en el entorno de los 1,2 millones de euros, el 20 por ciento, respaldado por un "sólido plan de negocio". A su juicio, la iniciativa es una "garantía" porque al "excelente" proyecto se suma "el atractivo del entorno" y la contrastada capacidad de gestión de Castilla Termal.
En total, 16 socios de Alentia han decidido participar (siete personas físicas y nueve jurídicas), con aportaciones que van desde los 6.000 a los 300.000 euros. En el entorno de tres o cuatro años el proyecto verá sus primeros resultados y "se podrá gratificar a los inversores", si bien Arias avanzó que en el un plazo de seis o siete años está determinado que "algunos socios de los 16 puedan salir de la mano del socio mayoritario".
Entre los inversores de Alentia se encuentran los hermanos Del Villar, propietarios de las bodegas del mismo nombre en la Denominación de Origen Rueda.
