
El sector eólico regional reabre su ofensiva contra la ecotasa -el impuesto medioambiental que implantó la Junta y que grava la producción y transporte de energía- después de que la nueva regulación del sector eléctrico dé otra vuelta de tuerca a la crítica situación del sector.
"Siempre hemos estado en contra de la ecotasa porque ni es tasa ni es medioambiental pero ahora su retirada está más que justificada", asegura el secretario general de la Asociación de Promotores de Energía Eólica de Castilla y León, Eugenio García Tejerina.
Y es que el nuevo borrador de la orden que Industria remitió a principios de febrero a la Comisión Nacional de Mercados de la Competencia que supone acabar con las subvenciones para todos los parques construidos con anterioridad a 2005. En Castilla y León esta orden supondrá dejar fuera de cualquier ayuda a 80 instalaciones, o lo que es lo mismo al 30 por ciento del total de los casi 270 parques que existen en la actualidad y que generan 1.800 megavatios de los 5.555 de potencia instalada en la comunidad. En total, estas instalaciones dejarán de percibir el 50 por ciento de sus ingresos.
En las instalaciones posteriores a ese fecha está por ver el impacto real de la reforma ya que por el momento es muy dificil de cuantificar porque la norma fija muchas variables a tener en cuenta.
Tejerina explica que ante esta situación, estas centrales no podrán seguir sufragando una carga fiscal que supone un 4 por ciento de los gastos de explotación. "La ecotasa es una ruina para unos y un desastre para otros", asegura. "Va a haber muchos que no puedan hacer frente a la amortización de sus inversiones y el problema se va a trasladar a los bancos", advierte.
El secretario general de Apecyl recuerda que la existencia de esta ecotasa ya ha supuesto un perjuicio a la hora de fijar las instalaciones que perderán las ayudas. En la orden de Industria se establece que aquellos parques con una vida útil de 20 años que ya han alcanzado un rendimiento neto del 7,5 por ciento "aunque no se han tenido en cuenta a la hora de hacer esa explotación estándar ni las cargas financieras ni aquellas tasas e impuestos que no tuviesen implantación de carácter nacional", explica. García Tejerina advierte que "en este entorno extremadamente hostil el valor de Castilla y León como lugar de desarrollo eólico se pierde totalmente".
En la actualidad hay otros 26 parques eólicos en tramitación pero pendientes de la correspondiente autorización administrativa. No se sabe la retribución que tendrán, a lo que se suma que la norma será revisada cada tres años.
"Durante estos últimos años la inversión que ha hecho el sector en la comunidad autónoma ronda los 7.000 millones de euros, lo que ha permitido la creación de unos cuantos centenares de puestos de trabajo. Alguien tendrá que tener en cuenta eso", afirma.
El día que García Tejerina atendía a 'elEconomista' ultimaba la carta que enviarán a la Administración autonómica para solicitar una cita en la que trasladar oficialmente su petición de retirada de la ecotasa. "En todas las comunidades se ha ido quitando y sólo quedamos ya Castilla y León y Galicia con el gravamen". El representante de Apecyl se muestra optimista ante la respuesta de la Junta y asegura que"de haberse dado estas condiciones, estoy seguro de que no lo habrían creado"