
Siembra y recogerás. La cita bíblica se ha convertido en toda una fórmula de éxito para la compañía hortofrutícola Huercasa. Su apuesta hace 12 años por los mercados exteriores ha permitido a la empresa segoviana mitigar los efectos de la crisis en nuestro país. El pasado año, su volumen de negocio aumentó un 20% hasta alcanzar los 20 millones de euros, con lo que logró evitar el impacto de la reducción de márgenes en su resultado bruto de explotación, que se mantuvo en los niveles del ejercicio anterior.
"Ha sido un año satisfactorio por los buenos resultados de las ventas, que han evolucionado favorablemente en ambos mercados, tanto nacional como en exportación, lo que demuestra una magnífica vitalidad de crecimiento y refleja que nuestros productos de V gama aún no han alcanzado su madurez comercial y que tienen un largo recorrido por delante", explica el director comercial, Carlos Olmos.
Internacionalización
La estrategia visionaria de internacionalizarse, cuando el mercado español todavía vivía sus mejores momentos, ha hecho que el 80% de la facturación provenga de fuera de nuestras fronteras, fundamentalmente de los países europeos, aunque la empresa segoviana "se afianza con fuerza" en nuevos mercados de países emergentes de la Europa del Este.
La apuesta no acaba ahí. "Debemos pensar en global y actuar en local, lo que nos lleva a desarrollar continuamente nuevas estrategias de internacionalización", explica Carlos Olmos. Actualmente la empresa trabaja tanto en nuevos proyectos en el exterior como en el lanzamiento de los productos y presentaciones que demanda el mercado y que verán la luz en los próximos meses.
El directivo asegura que, aunque el sector de la alimentación en nuestro país es uno de los que mejor está escapando de las "nefastas consecuencias" de la crisis, "sí se está viendo afectado a nivel de precios con una reducción de los márgenes comerciales hasta el límite, lo que ha obligado a Huercasa a acentuar la eficiencia en los procesos y a un mayor control de gastos, sobre todo, con la optimización de recursos en las compras de materias primas de campo", explica el director comercial.
La autenticidad de los productos de la huerta y la última tecnología en el procesado y envasado es la receta que ha llevado a Huercasa a ganarse la confianza, no sólo de los consumidores españoles, sino de países tan exigentes en seguridad alimentaria como Reino Unido o Finlandia. La empresa no sólo envasa al vacío productos frescos -endivias- o productos de V Gama (cocidos), sino también maíz dulce, remolacha, patata, zanahoria, remolacha, puerros, lentejas, alubias o garbanzos. Huercasa comenzó sus actividades en 1979 y en la actualidad da trabajo a entre 150-200 personas dependiendo de la temporada. Sus principales canales de distribución son el retail y los mercados mayoristas especializados.