
La patronal de Castilla y León (Cecale) se enfrentará dentro de muy pocas semanas a unas elecciones trascendentales. Después del paréntesis de unidad vivido durante el mandato de Jesús Terciado, que ya ha anunciado que lo deja para centrarse en la presidencia de Cepyme, el fantasma de la división vuelve a agitarse en los prolegómenos electorales.
La cruenta y silenciosa guerra que las organizaciones provinciales de León, Zamora y Salamanca, alentadas fundamentalmente por el secretario general de esta última provincia, para arrebatar a la estructura regional subvenciones y ayudas a la formación, probablemente no hayan sido nada más que un intento de desgastar a Terciado y, a la vez, una maniobra ante las próximas elecciones en Cecale y conseguir así alguna vicepresidencia.
La peor opción es que sea realmente un movimiento de desestabilización que pretenda desembocar en la situación de división y desgobierno ya conocidas. El tiempo dirá pero no está la cosa como para desaprovechar energías en luchas estériles.
El panorama que más de uno vislumbra es que Cecale deberá enfrentarse durante los próximos meses a una auténtica catarsis. La reducción de las ayudas que reciben las organizaciones empresariales para meter en cintura el desbocado déficit puede ser una simple anécdota si cristalizan los movimientos que algunos empiezan a visualizar para que la patronal y las cámaras de comercio compartan la representatividad reservada hasta ahora a la primera.
Ya se están dando pasos a nivel nacional y en otras comunidades, y la Junta, lejos de ver en ello un problema, aplaudiría esta opción para solucionar la falta de financiación de las entidades camerales. Si triunfa esta operación, la patronal tendría que compartir las cantidades que recibe con las cámaras y los problemas para mantener muchas estructuras provinciales serían dramáticos. La beligerancia de los candidatos que se postulen a la presidencia de Cecale ante esta cuestion será muy probablemene la que determine quién será el futuro sucesor de Terciado.
RAFAEL DANIEL
Delegado de elEconomista en Castilla y León