Un juez ha confirmado que María Teresa Rodriguez Sainz-Rozas es "plena y legitima titular del 55 por ciento de las acciones de la compañía. Tres de sus hijos reclamaban parte de la participación.
El Juzgado de Primera Instancia de Palencia ha dictado una sentencia que desestima una demanda contra la presidenta y consejera delegada de Galletas Gullón, María Teresa Rodríguez Sainz-Rozas, que fue interpuesta hace dos años por sus hijos y hermanos varones con la pretensión de que se les adjudicara la propiedad de ciertas acciones de la galletera, alegando que formaban parte de una fiducia familiar. De esta forma, se confirma a la presidenta como "plena y legítima titular de sus acciones según informaron fuentes de la compañía en un comunicado.
La interposición de la demanda, según se señaló desde la dirección de Galletas Gullón, "dio lugar a múltiples noticias en los medios que pudieron contribuir a generar un debate entre la opinión pública que puso en cuestión la mayoría accionarial de María Teresa Rodríguez Sainz-Rozas". Al respecto se explicó que en noviembre de 2010, los demandantes intentaron "desistir" del procedimiento-mecanismo procesal que les hubiera permitido volver a iniciarlo en el futuro.
María Teresa Rodríguez Sainz-Rozas se opuso pidiendo expresamente que el pleito continuara hasta que hubiera una sentencia que aclarase "el fondo del asunto". Por ello, el procedimiento continuó hasta que -a pocos días de la fecha señalada para el juicio (12 de marzo de 2012- los demandantes han acabado renunciando al mismo y reconociendo expresamente que la actual consejera delegada es la propietaria de las 16.544 acciones que posee en Galletas Gullón y que representan un 55,29 por ciento del capital social, renunciando a cuestionar esta propiedad en el futuro.
La presidenta y consejera delegada se ha mostrado satisfecha por la sentencia ya que contribuye a la "estabilidad y seriedad que siempre ha caracterizado a la compañía". Además, aunque lamentó que sus hijos varones y hermanos pusieran en duda la titularidad de sus acciones, aseguró que "este proceso ha servido para demostrar públicamente" su condición de máxima accionista y "para aclarar parte del conflicto societario planteado en su día por los demandantes".
Por último, ha afirmado que su "deseo es mantener la gestión empresarial que ha desarrollado en los últimos 25 años". Tal y como señaló, la gestión ha estado basada en "la reinversión de los beneficios, la apuesta por la innovación, el desarrollo y la creación de productos saludables y, por supuesto, continuar creando empleo que dé trabajo a los habitantes de Aguilar y la comarca".
