
La consejera de Hacienda, Pilar del Olmo, dibujó ayer un serio panorama. La Junta tendrá problemas para afrontar sus pagos si el Gobierno no mete liquidez a las comunidades autónomas.
La consejera de Hacienda de la Junta de Castilla y León, Pilar del Olmo, ha destacado este martes la confianza del Gobierno de la nación en las posibilidades de la Comunidad Autónoma castellanoleonesa para que cumpla el objetivo del déficit a finales del año (1,3 por ciento sobre el PIB) si bien ha reconocido que no será sin esfuerzos.
Del Olmo, que se ha reunido este martes con el equipo del Ministerio de Economía y Hacienda para repasar los datos sobre el déficit de la comunidad autónoma -1,1 por ciento en el primer semestre del año según los últimos datos publicados-, se ha comprometido a aprobar "lo antes que podamos" -a finales de septiembre o primeros de octubre- un plan de ajuste financiero para racionalizar el gasto, si bien ha admitido que, aunque podrá tener efectos en 2011, su aplicación real será en los ejercicios de 2012, 2013, 2014 y 2015.
Dicho esto, ha aprovechado la ocasión para advertir de los "problemas de liquidez" que tienen las comunidades autónomas por las restricciones que imponen los mercados financieros por lo que ha reclamado una vez más al Ejecutivo los 211 millones de euros que corresponden a la Región como anticipo por los Fondos de Convergencia, un asunto en el que, por primera vez, "no se ha cerrado la puerta del todo", lo que ha considerado como "un gran avance".
De no llegar ese dinero, ha reconocido la titular de Hacienda, Castilla y León tendrá problemas de liquidez antes de finalizar el año que se traducirían en "problemas de pago" para aquellos conceptos que no sean indispensables e imprescindibles -entre los pagos imprescindibles ha citado los intereses de la deuda y el pago de créditos, las nóminas, la dependencia o el mantenimiento de centros-.
Pilar del Olmo ha achacado los problemas financieros y de liquidez de las comunidades autónomas al Gobierno de España por lo que ha exigido su colaboración con el pago del dinero que adeuda a las autonomías, que en el caso de Castilla y León asciende, según sus datos, a 724 millones de euros que pondrían a la región en situación de superávit.
Castilla y León, pese a su disciplina fiscal estos años atras, no ha conseguido formalizar "los docientos y pico" millones que tiene pendiente, reconoció la consejera.
Otras de las soluciones que ha propuesto Del Olmo en esta reunión en el Ministerio de Economía y Hacienda han sido una financiación del Gobierno a las comunidades autónomas similar a la utilizada en el FROB, es decir que consiga dinero en los mercados internacionales "que se han cerrado a las comunidades autónomoas" y luego se lo inyecte a las regiones o una financiación a través del ICO.
La consejera ha reiterado asimismo que en términos de Contabilidad Nacional el déficit de Castilla y León es del 0,65 por ciento, un asunto en el que "no ha habido discusión" con los integrantes del Ministerio de Economía y Hacienda, con los que ha repasado las medidas y los números de los planes financieros de Castilla y León.