
Caja España-Caja Duero ha superado la prueba. La entidad supera los niveles mínimos requeridos, al situar su capital principal (core tier 1) en el 7,3 por ciento en 2012 bajo el escenario adverso, por encima del 5 por ciento requerido.
Caja3, donde está integrada Cajacírculo, es el único grupo con cajas de ahorro con origen en Castilla y León que suspende en el escenario adverso analizado, mientras que Bankia (donde están integradas Caja de Ávila y Caja Segovia) y Banca Cívica (con Caja de Burgos) también superan las pruebas.
Caja España de Inversiones Salamanca y Soria, CAMP aprobó "sobradamente" la prueba de resistencia 2011 que ha llevado a cabo en toda la Unión Europea la Autoridad Bancaria Europea (EBA, según sus siglas en inglés), en coordinación con el Banco de España, el Banco Central Europeo, la Comisión Europea y el Consejo Europeo de Riesgo Sistémico. Los resultados de estas pruebas determinan que Caja España-Caja Duero supera los niveles mínimos requeridos, al situar su capital principal (core tier 1) en el 7,3 por ciento en 2012 bajo el escenario adverso, comparado con el 8,2 por ciento existente a finales de 2010, pero claramente por encima del cinco por ciento establecido como mínimo para esta prueba de resistencia.
La caja valoró positivamente estas calificaciones y subrayó la gestión realizada desde la fusión en materia de reducción de la morosidad, control del gasto y mejora de la actividad comercial. A su vez, mostró su determinación para seguir velando por mantener en el futuro unos niveles adecuados de solvencia.
Este resultado incorpora los efectos de las medidas anunciadas y plenamente comprometidas hasta el 30 de abril de 2011 y que básicamente consisten en el plan de recapitalización presentado por la entidad en marzo pasado en el marco del Real decreto Ley 2/2011 para el reforzamiento de los recursos propios de las entidades de crédito. No obstante, incluso sin tener en cuenta la capitalización prevista en dicho plan, Caja España-Caja Duero superaría el umbral de cinco por ciento requerido.
Por otro lado, el ratio de capital principal se situaría en el 8,4 por ciento si se tiene en cuenta los 288 millones de provisiones por insolvencias, con capacidad para absorber pérdidas de acuerdo con la normativa española. Estas provisiones por insolvencias, de acuerdo con la metodología del EBA, por su particularidad nacional, han sido consideradas, no como capital principal, sino como acciones mitigadoras adicionales.
La caja afirmó que seguirá velando por mantener en el futuro unos niveles adecuados de solvencia y que le permitan superar holgadamente cualquier ejercicio de resistencia que se plantee en el futuro. Desde Caja España-Caja Duero destacan que tienen un perfil de inversión conservador, que no tiene ninguna exposición neta en la cartera de negociación. La exposición soberana en sus libros es "casi exclusivamente" frente a su país de origen, España, donde desarrolla mayoritariamente su negocio minorista.
La prueba de resistencia se ha llevado a cabo sobre 91 bancos de la UE que representan más del 65 por ciento de los activos totales del sistema bancario de la Unión, y pretende evaluar la capacidad de los bancos europeos de absorber fuertes impactos negativos en su negocio y su solvencia específica para abordar situaciones hipotéticas de tensión en condiciones adversas.
Los supuestos y la metodología utilizada establece que el nivel mínimo requerido de capital principal (core tier 1 en nomenclatura EBA) para las entidades objeto de la prueba sea del cinco por ciento y están destinadas a restaurar la confianza en la capacidad de resistencia de los bancos evaluados en la prueba. El escenario de las pruebas de tensión adversa fue fijado por el Banco Central Europeo y cubre un horizonte temporal de dos años (2011-2012).
La prueba de resistencia se realizó utilizando un supuesto de balance estático a 31 de diciembre de 2010, es decir, sin crecimiento ni variaciones en la composición de los negocios. La prueba de esfuerzo no tiene en cuenta las estrategias empresariales, evolución de los negocios en dichos ejercicios y acciones futuras de gestión y no supone por tanto una previsión de la evolución de los beneficios de Caja España-Caja Duero en los ejercicios 2011 y 2012.