La Agencia Andaluza de Evaluación Educativa cuesta 0,90 euros por alumno al año, un "coste modélico", según ha afirmado la consejera de Educación de la Junta de Andalucía, Mar Moreno, en el Parlamento, donde ha defendido la cultura de la evaluación como "instrumento de mejora" del sistema educativo.
En este sentido, ha señalado que su auténtico objetivo debe ser diagnosticar y poner en marcha líneas de mejora, "y no establecer ránkings o reválidas, como propone la reforma del Gobierno del PP y que convierten el proceso educativo en una carrera de obstáculos para alumnos, profesorado y centros".
La titular autonómica de Educación ha recordado que Andalucía ha sido pionera al someterse a evaluaciones internacionales como PISA antes que comunidades como Madrid, Valencia, Baleares o Murcia. A través de la participación en los estudios PISA, PIRLS, TALIS, TIMMS y otros, Andalucía dispone de información detallada en competencias básicas, en comunicación lingüística, razonamiento matemático, conocimiento e interacción con el mundo físico y natural de "más de 500.000 alumnos", ha destacado. "Son datos contrastados, ricos y muy relevantes, que permiten hacer un diagnóstico del sistema educativo y formular propuestas de mejora", ha manifestado.
Respecto a la Agencia Andaluza de Evaluación Educativa, creada en 2008 como "agencia administrativa", ha señalado que colabora con organismos nacionales e internacionales, establece un sistema de indicadores para la autoevaluación de los centros educativos y realiza pruebas de diagnóstico y la prueba Escala, entre otras. "Aportamos a los centros alrededor de un millón de informes por curso del alumnado", ha subrayado, para que puedan conocer su tendencia y sus datos de promoción, titulación y promoción de alumnado gracias a medidas de refuerzo, entre otros aspectos.
Moreno ha señalado que esa seguirá siendo la "hoja de ruta" de la Consejería y ha avanzado que desde su departamento se está trabajando en un decreto sobre evaluación "que ya está muy avanzado" y que define un modelo "de vanguardia" en el que la implicación de los centros, la Inspección educativa y la Agencia de Evaluación garantiza una "mejora continua" del sistema educativo andaluz, "que huye de todo tipo de selección y segregación del alumnado".