
Idea que ha expuesto en su ponencia sobre 'Dos fantasmas de la Transición y dos problemas de nuestro gobierno parlamentario', dentro del Seminario 'Iñigo Cavero Lataillade', organizado por el Instituto CEU de Estudios de la Democracia.
El catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad Complutense de Madrid, Alfonso Fernández-Miranda, ha sido el protagonista de la primera sesión del Seminario Iñigo Cavero Lataillade, foro de debate y análisis que celebra este curso su primera edición y que está organizado por el Instituto CEU de Estudios de la Democracia.
Según Fernández-Miranda, en los procesos sociales que se gestan en un ambiente de incertidumbre y miedo, como el de la transición, aparecen fantasmas. El primero de estos, que se dio en el periodo de transición, es la idea de que la sociedad española estaba fragmentada, "fruto de una percepción equivocada de la realidad". Esto "condujo a diseñar una forma de gobierno que fortaleció el poder ejecutivo, en una España que en realidad no estaba fragmentada, sino que tenia un notable grado de homogeneidad y donde existía un gran bipartidismo".
El segundo 'fantasma', según Fernández-Miranda, es la idea de que nuestra sociedad estaba 'desvertebrada', que condujo a la voluntad de fortalecer al máximo los partidos políticos.
Para el ponente, "el problema de nuestro sistema de gobierno en comparación con los de otros países europeos es de cultura democrática". Por ejemplo, ha explicado, en el Reino Unido ocurre que los jueces son nombrados por el gobierno, y sin embargo, tienen mayor independencia que los españoles. Ha remarcado que una posible reforma estaría bien pero que "siempre existe el peligro de destruir lo que sí funciona correctamente" y ha añadido que "conviene valorar la estabilidad de gobierno que ha tenido España".