
Sao Paulo, 31 oct (EFE).- El presidente del Banco Santander, Emilio Botín, anunció hoy que la entidad esperar ganar 18.800 millones de reales (unos 6.920 millones de euros) en Brasil en tres años tras la integración de Banco Santander Brasil con Banco Real -adquirido en 2007 como parte del paquete de activos en la operación ABN Amro-.
Durante su intervención en la presentación del Plan Estratégico de la entidad en Brasil, Botín explicó que el beneficio del banco será de 4.800 millones de reales en 2008 (unos 1.770 millones de euros); 6.100 millones de reales en 2009 (unos 2.550 millones de euros), y 7.900 millones de reales en 2010 (unos 2.950 millones de euros).
Para ello, informó el presidente del SANTANDER (SAN.MC) el banco invertirá en el país unos 2.550 millones de reales, (más de 920 millones de euros), con lo que conseguirán aumentar los ingresos y el volumen de negocio en un 15 por ciento.
Botín reafirmó su intención de convertirse en el banco privado "número uno" del país suramericano porque para la entidad Brasil es prioritario, ya que, reiteró, "el que no está en Brasil no está en Sudamérica".
El beneficio esperado en Brasil para los próximos tres años incluye además unas sinergias mayores de las que el banco previó inicialmente, explicó.
Así, hasta 2011, la entidad calcula unas sinergias de costes por la integración de 2.400 millones de reales (unos 885 millones de euros), un 22 por ciento de la base de costes frente al 18 por ciento previsto, y, adicionalmente, el banco prevé unos 300 millones de reales (unos 110 millones de euros) de sinergias de ingresos.
La entidad también quiere ampliar la red comercial, hasta 400 agencias nuevas en tres años, pretender aumentar la cuota de mercado y, por supuesto, añadió Botín, no dejar a la competencia "que nos robe clientes".
Con la integración de Santander y Real, consideró Botín, la entidad tiene una oportunidad "única" de lograr ser el principal banco minorista del país y de jugar un papel protagonista en el fortalecimiento del sistema financiero brasileño.
En su opinión, Brasil tiene en la actualidad mayor estabilidad macroeconómica, institucional y social y es además uno de los países que mejor está resistiendo la crisis financiera internacional, razones de peso para apostar con fuerza por el país.
Asimismo, explicó que Santander y Real son dos bancos complementarios tanto geográficamente como por negocios, lo que le permite al grupo, de momento, convertirse en uno de los tres primeros bancos privados del país, con una cuota de mercado del 10 por ciento en depósitos y del 12 por ciento en créditos.
En la misma línea, el consejero delegado de la entidad, Alfredo Sáenz, añadió que Brasil será uno de los motores del crecimiento del grupo, en tanto que el responsable de la entidad en el país, Fabio Barbosa, subrayó que el banco pretende crecer más que el mercado en ingresos y menos en gastos, al tiempo que quiere aumentar la satisfacción de empleados y clientes.
Sáenz consideró que, ante el proceso de desapalancamiento que sufrirán muchos mercados maduros, tener una cartera de negocios con un buen equilibrio entre mercados emergentes y maduros es "imprescindible".