
Burgos, 16 oct (EFE).- El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha considerado hoy un peligro para la recuperación económica de España el empeoramiento de los datos de la balanza comercial exterior.
Ha explicado que el estancamiento de países como Francia e Italia, clientes de muchas empresas españolas, están rebajando el nivel de las exportaciones, mientras aumentan las importaciones por el crecimiento del Producto Interior Bruto.
En su opinión, mantener una balanza comercial exterior positiva es "fundamental" para España porque mantiene una deuda externa muy alta, prácticamente igual al Producto Interior Bruto, por lo que no contar con fondos de la balanza para pagarla puede llevar a una excesiva dependencia de las condiciones del mercado.
En una conferencia-coloquio con empresarios organizada por la Cámara de Comercio de Burgos, Goirigolzarri se ha mostrado convencido de que el mundo está saliendo de "una crisis muy fuerte", aunque ha matizado que lo hace con una velocidad inferior a la prevista, de forma titubeante, con altibajos y no de forma uniforme en todas las regiones del mundo.
En este sentido, ha llamado la atención sobre la diferencia del comportamiento entre Estados Unidos y Europa durante la crisis, que ha llevado a que el Producto Interior Bruto estadounidense haya crecido en este periodo un ocho por ciento, mientras el europeo ha bajado un dos.
Entre las razones para esta diferencia, el presidente de Bankia ha recordado que, aunque Europa entró en la crisis en mejores condiciones que Estados Unidos, al no gobernarse como un todo dejó que cada país actuara a su manera sin una coordinación que debería haber llevado a medidas de contención del gasto en algunos países, como España, y de expansión en otros.
A estos se sumó, según Goirigolzarri, la elevada deuda soberana de algunos países, como el caso de España.
Pese al riesgo del empeoramiento de la balanza comercial, el presidente de Bankia ha recordado que España aprovechó la reacción europea, sobre todo con pasos hacia la unión bancaria, para aplicar una agenda de reformas que evitó el rescate y que en los últimos meses ha dado lugar a noticias positivas, como el crecimiento del Producto Interior Bruto y de la confianza exterior.