
Pamplona, 25 feb (EFE).- El vicesecretario general de la sección sindical de UGT en CaixaBank, Iosu Pardo, ha anunciado que su sindicato no aceptará la aplicación de medidas forzosas para el ajuste de plantilla, que afectará a 3.002 empleados de la entidad financiera.
Este ajuste de plantilla ha sido presentado hoy a los sindicatos en una reunión mantenida en Barcelona, en la que no se ha entrado en ningún tipo de concreción.
En esta reunión, ha explicado Pardo, se ha constituido la mesa negociadora y se ha fijado un calendario que se puede prolongar unos dos meses.
Pardo ha comentado que en el encuentro de hoy han mostrado su desacuerdo con la forma en que se está aplicando el Acuerdo de Reestructuración de Banca Cívica, que sigue en vigor y que mantiene abierto el plazo para acogerse a bajas incentivadas hasta el 31 de diciembre.
"Esperamos que esta negociación sea de buena fe", ha destacado Pardo, que ha apuntado que la empresa debe explicar a los sindicatos "cuál es el problema" que tiene CAIXABANK (CABK.MC)para plantear este ajuste de plantilla y cuál es el objetivo que se persigue con este tipo de medidas.
Si en la reunión que se celebrará probablemente el próximo jueves, ha agregado, CaixaBank presenta una serie de medidas "adecuadas" y la UGT entiende que éstas sirven para solucionar los problemas que pueda tener la empresa, las estudiarán.
Cuando tengan esa información, ha dicho, "ya valoraremos si aceptamos o no medidas voluntarias, pero a día de hoy no podemos decir mucho más".
Pardo ha estimado que el ajuste de plantilla no debería tener una gran incidencia en Navarra, donde los trabajadores de Banca Cívica han hecho ya "un esfuerzo muy importante" en aplicación de los acuerdos de reestructuración.
En ese sentido, ha afirmado que, para que las prejubilaciones afectasen de manera significativa a Navarra, se tendrían que situar en el entorno de los 54 o 55 años, por lo que las ha descartado por el elevado coste económico que tendrían.
Además, ha asegurado que en Navarra a su juicio ya está completado el plan de movilidad geográfica y por ello no debería haber un excedente de plantilla salvo que la empresa decida el cierre de oficinas, una posibilidad sobre la que Pardo no tiene constancia, aunque tampoco se ha tratado en la reunión de hoy.