
El grupo estadounidense Bank of America busca reunir 10.000 millones de dólares de capital fresco adicionales por sin no logra convencer a las autoridades de Washington de su solidez económica, según informa hoy Financial Times. Esta noticia llega después de que también se hiciera público que Citi podría necesitar otros 10.000 millones de dólares.
"Fuentes cercanas al caso han señalado que Citigroup (C.NY), BoA (BAC.NY) y al menos otras dos entidades crediticias intentarán el lunes convencer al Tesoro y a la Reserva Federal de que las conclusiones de los test de estrés o pruebas de resistencia sobre su salud financiera son demasiado pesimistas", revela el diario británico en su sitio web.
El Wall Street Journal ya había informado el viernes de que Citigroup podría llegar a necesitar recaudar capitales por 10.000 millones de dólares además de los 45.000 millones de fondos limpios que recibió por parte del Estado desde el otoño boreal.
A petición del Tesoro, la Reserva Federal (Fed) y otros reguladores financieros estadounidenses sometieron a los 19 principales bancos a pruebas de resistencia para medir su capacidad para enfrentar una fuerte y prolongada degradación de la coyuntura económica.
Según FT, los resultados del test de estrés al que están siendo sometidos 19 bancos norteamericanos demuestran que estas dos entidades serían las que con mayor probabilidad necesitan captar capital nuevo. No obstante, Wells Fargo y PNC Financial son también dos de los bancos que necesitarían ayuda en caso de que la crisis se agravara en los próximos meses.
Los analistas creen que cuando se publiquen los resultados, muy probablemente el próximo día 7 de mayo, las autoridades anunciarán que los 19 bancos gozan de buena salud, aunque sí informarán de aquellos que necesitan aumentar su capital para hacer frente a una posible recesión.
Representantes del Gobierno admitieron haber mantenido reuniones con las entidades bancarias sobre estos resultados en las jornadas previas a su publicación, por lo que adviertieron de que a aquellos bancos a los que se recomiende captar nuevo capital no deben ser vistos como "insolventes", ya que ese capital debe servir como "colchón" frente a potenciales pérdidas.